"Zanjas" es un filme que mira al interior de la persona

Misterio de un hombre en tránsito

"Zanjas" ( Argentina, 2015) . Dirección y guión: Francisco J. Paparella. Fotografía: Matias Lixklett. Música: Alejandro Ferrer, Johnny Roldan. Actores: Diego Alonso, Danile TIsato, Augusto Britez. Duración: 75 minutos. Calificación: apta para todo público.

Si hay un elemento que destaca en "Zanjas" es el paisaje. Desde el comienzo, con la ventisca y la nieve, la imponencia de la Naturaleza no puede sentirse sin su carga de hostilidad. ¿Cómo puede tanta belleza traer, incluso, problemas de sobrevivencia?

Ahí está Zamora. Nunca sabremos casi nada de él, sólo al final. Habla poco, como el resto de la gente del lugar (no sabemos si es de ahí). Changarín rural más que empleado, su extraña compulsión al trabajo llama la atención y la necesidad de dejar el cuerpo en la tarea dura parece acostumbrarlo para tareas peores.
Del exterior nos enteramos por la televisión, la radio, y todo apunta a algunas mujeres que asesinaron y un reportaje patético a la madre de una víctima. Lo obvio sería que estuviéramos frente a un asesino serial en tren de redención. La obsesión por castigarse, la asistencia a una capilla, la elección de un lugar inhóspito en las alturas en el que otro cuidador se ahorcó tiempo atrás, parece consolidar la idea. La explicación la da el final y la tensión se mantiene.

OPERA PRIMA
El director Francisco Paparella, de poco más de treinta años, fue un habitante de la Patagonia durante su infancia y adolescencia. Su condición se revela totalmente en la descripción del paisaje y de la gente del Sur profundo que su película aborda.
"Zanjas" es una suerte de peregrinación donde el frío, la nieve, la belleza de las cumbres, algún intermedio de dados, jineteadas o mínimos intercambios de palabras encuadran una realidad hostil. Un intérprete ideal para el solitario personaje de Zamora es Diego Alonso ("Okupas", "Tumberos"), con su rostro tallado en piedra, pura fuerza e interior, que diagrama con su presencia la incógnita de una individualidad que desconocemos.
Filme que exige una visión no tradicional y, como el valioso documental de Martín Farina "El hombre de Paso Piedra", con el que tiene algunos puntos de contactos, se ambienta en la región patagónica.
La película de Paparella no aporta suficientes situaciones que recuperen el agobio del espectador, acostumbrado a clásicos filmes comerciales con continuos puntos de distracción. Quizás un mayor detenimiento en el protagonista, casi siempre inmerso en la imponencia de la Naturaleza, impide que sus sentimientos sean apreciados en toda su intensidad.
"Zanjas" es un filme interior, de autor, de protagonista y clima, donde llama la atención la fotografía estética y densa, mientras algunos momentos sonoros condensan una extraña sensación de inquietud.

Calificación: Buena