Mar del Plata: una mujer fue asesinada de un tiro en la cabeza y por el crimen la policía busca a su pareja

El agresor violó el arresto domiciliario, la mató y escapó tras el ataque.

Una mujer de 34 años, identificada como Valeria Britez, fue asesinada por su pareja, Walter Scott (37) de un disparo en la cabeza en el barrio Belgrano.

La manera en que sucedió el hecho y el vínculo que mantenía el hombre y la mujer está siendo reconstruido por los investigadores.

Según testimonios de familiares,  la pareja estaba separada pero vecinos afirman que vivían juntos.

Inés, la hermana de la víctima, contó que Britez se encontraba anoche a metros de su vivienda caminando junto a su hija de 14 años rumbo a un comercio, cuandofue interceptada por su marido y recibió un disparoque le causó la muerte de manera instantánea. Scott se dio a la fuga y es intensamente buscado por la Policía.

“Tenían una relación enfermiza de muchos años. El tenía restricción“, aseguró la hermana de la víctima en diálogo con María Delia Sebastiani en LU6.

Según explicó, el crimen ocurrió a apenas “20 metros de la vivienda” de Britez, ubicada en Soler al 10800.

“Ella estaba en la esquina, iba al almacén junto a su hija de 14 años, quien hoy tenía previsto probarse en vestido para festejar sus 15. Él (por Scott) le puso el revólver en la cabeza y la mató“, contó.

Según Inés, su hermana había logrado que la Justicia le otorgara una orden de restricción para impedir que su pareja se acerca a su domicilio. De todos modos el hombre solía presentarse en la vivienda con frecuenciapara reclamarle reanudar la relación. “Le pegaba, la amenazaba, le puso varias veces el revólver en la cabeza“, aseguró.

Además Inés relató que según tiene entendido Scott sufre problemas de drogadependencia y que había egresado recientemente de prisión. “Estuvo preso hasta hace poco, salió y se aparecía como si nada”, afirmó.

Britez era madre de siete hijos, dos de los cuales eran fruto de su relación con Scott. “El más grande tiene 17 años y el más chiquito tiene 2 y todavía estaba tomando la teta”, contó Inés.