El jefe de Schaefer también habló de la mala relación que la víctima tenía con Farré

El testigo además le mencionó a la fiscal un episodio que la propia Schaefer mencionó en su denuncia ante la Oficina de Violencia Doméstica (OVD) de la Corte Suprema y que está relacionado con un mail que él recibió de parte de Fernando Farré.

El jefe de Claudia Schaefer declaró ante la fiscal que investiga su femicidio en el country Martindale, de Pilar, que estaba al tanto de que la víctima atravesaba una relación conflictiva con su marido, informaron hoy fuentes judiciales.

El jefe de Schaefer en las oficinas de Buenos Aires de las bodegas mendocinas Salentein fue uno de los dos testigos que declararon ayer ante la fiscal de Pilar Carolina Carballido.

Fuentes judiciales indicaron que el testigo además le mencionó a la fiscal un episodio que la propia Schaefer mencionó en su denuncia ante la Oficina de Violencia Doméstica (OVD) de la Corte Suprema y que está relacionado con un mail que él recibió de parte de Fernando Farré.

En ese correo electrónico, Farré le decía al jefe de su esposa que le sacara una serie de beneficios económicos que ella tenía para cubrir los gastos del uso de su camioneta Audi Q7 porque él, que había perdido su trabajo, planeaba vender ese vehículo importado.

Según declaró el testigo, Claudia se avergonzó de lo que había hecho su marido y tuvo que explicar en el trabajo los problemas personales que estaba teniendo con él.

También declaró ayer el jefe de seguridad del country Martindale que fue uno de los testigos de actuaciones seleccionados por la policía el día del crimen.

Este hombre aportó los nombres de los dos vigiladores que fueron los primeros en llegar a la escena del crimen ante un llamado de los vecinos, quienes serán citados a declarar en los próximos días.

Además, ratificó que por lo que sabe, luego de cometer el asesinato, Farré nunca tuvo intenciones de fugarse del country, sino que salió del vestidor donde ocurrieron los hechos y se sentó en un sillón a esperar la llegada de la policía.

Como fue testigo de actuaciones, la fiscal Carballido aprovechó para preguntarle por la ubicación de los cuchillos y el jefe de seguridad ratificó que los dos cuchillos secuestrados ensangrentados en la causa estaban junto al cadáver, en el piso del vestidor.

Además, declaró que, por su apariencia, parecían pertenecer al mismo set de cinco cuchillos que había en la cocina en un taco de madera donde había tres y justamente faltaban dos.

El próximo lunes, la fiscal tiene planeado escuchar como testigo a María, la empleada doméstica de la familia que según la denuncia de la propia víctima en la OVD, fue testigo directa junto a los tres hijos del matrimonio del dí­a en que Farré la tiró en un sillón y le colocó una rodilla en la cara.