LA GUERRA EN UCRANIA Y LA CRISIS ECONOMICA HIZO RESURGIR EN EUROPA EL SENTIMIENTO ANTIESTADOUNIDENSE

La desorientación de los occidentales

Decían los chinos que muy al Oriente está Occidente y yo añadiría hoy: "Muy al Occidente está el Oriente". Y el problema es que siento la desorientación de Occidente ya incluido los Estados Unidos. Por ello me voy a permitir analizar una artículo reciente publicado en Foreign Affairs de Hans Kandnani "Dejando al Occidente detrás". Y efectivamente mientras más leo acerca de lo que pasa en el mundo más percibo la confusión que existe respecto a la civilización occidental.

Y esa confusión se ha hecho más evidente como consecuencia de la reciente anexión de Crimea a Rusia y el apoyo de Putin a los rebeldes ucranianos. Al tiempo de escribirse estas líneas se ha producido un hecho relevante que fuera el acuerdo de Francia, Inglaterra y Alemania con Putin sobre la situación de Ucrania.

En dicho artículo el autor se refiere a lo que considera la paradoja alemana, como consecuencia del vuelco dado por Alemania ante la presente situación creada por la ingerencia de Rusia en Ucrania. Así partiendo de dicha paradoja alemana dice: "Por una parte muchas de las ideas filosóficas que se convirtieron en centrales del Occidente (West) se originaron en Alemania con pensadores del Iluminismo como Immanuel Kant".

En esas palabras el autor parte de confundir desde el Iluminismo las dos filosofías políticas antitéticas que se generaron en el Occidente geográfico. Por ello, esa primera proposición implica el desconocimiento del pensamiento de Kant, al que me voy a referir, que se opone directamente al pensamiento de John Locke que fue el generador de las ideas que crearon el liberalismo occidental.

En primer lugar me atrevo a repetir que del llamado Iluminismo, surgió lo que considero el oscurantismo de la razón. Y Kant fue un seguidor ideológico de Rousseau a quien consideraba el Newton de las ciencias morales.

LA FELICIDAD

En primer lugar Kant en su La metafísica de las costumbres comienza por descalificar éticamente el derecho a la búsqueda de la felicidad, pues sólo es moral lo que se hace por deber. En esta simple observación descalifica el principio que Locke consideraba fundamental de la libertad. Por tanto todo interés privado es contrario a la moral y consiguientemente llega a la siguiente conclusión respecto al gobierno: "El soberano del Estado tiene solo derechos en relación a sus súbditos y no deberes coercibles; en efecto aun la constitución verdadera no puede tener ningún artículo que pueda hacer posible para algún poder dentro del Estado el resistir o detener al supremo ejecutivo en casos que el viole la Constitución nacional". Creo evidente que de estos principios surge el totalitarismo. 

Siguiendo con su concepto moral, Kant descalifica éticamente al comercio pues se hace por interés y no por deber. Aun cuando el comerciante reduce los precios por efecto de la competencia no es moral pues sigue actuando por interés y no por deber. La descalificación ética del comercio implica como consecuencia la ética de la guerra y al respecto en su Una idea para una historia universal con un sentido cosmopolita, previamente determina que la razón está en la historia y concluye: "Los medios que la naturaleza emplea para lograr el desarrollo de las capacidades innatas es el antagonismo dentro de la sociedad. El hombre desea la concordia, pero la naturaleza sabiendo mejor lo que es bueno para sus especies desea la discordia".

Estos principios racionalistas de los cuales en La Paz Perpetua en alguna medida Kant los cambió, fueron la base por la cual Hegel arribara a conclusiones similares respecto al interés particular y concluyera: "El Estado es la divina idea tal como se manifiesta sobre la tierra". Y por supuesto en consecuencia de la descalificación ética de los intereses particulares arriba a la conclusión de que la guerra es el momento ético de la sociedad.

LLEGA MARX

Más tarde llegó Karl Marx que partiendo de principios similares arribó a la conclusión de que el capitalismo era la explotación del hombre por el hombre. Entonces sin entender que el sistema era ético y político y la economía su consecuencia descalificó el Rule of Law. Así concluye que el desarrollo bélico se generaba entre las clases sociales en la sociedad. Por tanto propone a diferencia de Hegel que la burocracia tampoco es moral y por consiguiente se requiere sustituir al Estado por la dictadura del proletariado para suprimir la propiedad privada. A los hechos me remito de los resultados de esa propuesta.

Todos los pensadores citados surgieron de Alemania y por ello considero que el nazismo tal como lo explica Hayek en su Camino de servidumbre surgió de esas ideas totalitarias. A ellas se añadió el racismo y como consecuencia el Holocausto y el afortunado error de la invasión a la U.R.S.S. en ruptura del previo acuerdo de paz Molotov-Ribbentrop.

Dicho lo que antecede lo que puede sorprender no es que Alemania en la actualidad pueda percibirse contraria a Occidente, o sea a los Estados unidos, sino el período en que partiendo del Plan Marshall y seguido por la Unión Europea, se considerara parte de Occidente. Según el autor del artículo citado, el problema de Alemania en Occidente comenzó con el nacionalismo que surgiera en el siglo XIX y que considera se opuso a los principios liberales racionalistas de la Revolución Francesa y el Iluminismo.

A mi juicio tales conclusiones implican una notable confusión respecto al mundo en que vivimos. En primer lugar ya debiéramos saber que el liberalismo cuando es racional deja de ser liberalismo. El racionalismo imperante en la Diosa Razón en la Revolución Francesa fue un subproducto del pensamiento de Rousseau, que partiera de la idea de crear un hombre nuevo. Y al respecto vale recordar el juicio de Peter Drucker: "No puede negarse que la Ilustración y la Revolución Francesa contribuyeron a la libertad del siglo XIX. Pero su contribución fue totalmente negativa. Lejos de ser las raíces de la libertad, la Ilustración y la Revolución Francesa fueron las semillas del despotismo totalitario".

ANTIAMERICANISMO

Dados estos antecedentes filosóficos no es difícil comprender el actual antiamericanismo alemán, que en estos momentos en alguna medida se condice con el interés económico de las relaciones con el Kremlin. Rusia es el más importante país del comercio internacional alemán, a quien exporta u$s 85.000 millones por año. Al respecto escribió The Economist: "El antiamericanismo ha sido endémico en Alemania. En la Alemania Occidental durante la guerra fría en la izquierda. los conservadores desdeñan la cultura americana y la Alemania del Este aun tiene una rusogermana afinidad ideológica" (sic).

Entonces me voy a volver a referir a lo que considero la actual confusión del Iluminismo, la Revolución Francesa y el Rule of Law. Y permítanme esta denominación en inglés pues ella implica una concepción ético-politica definida y no un concepto genérico como cuando nos referimos al estado de derecho. A ella le debemos el mundo en que vivimos que de haber sido por Europa seríamos nazis o comunistas. No obstante esa realidad, el antiamericanismo sustentado en el antiimperialismo permanece en Europa y se extiende a América Latina.

DICTADURA DEL NUMERO

El problema presente es la confusión del Rule of Law con la democracia mayoritaria. Como bien reconociera Nieztche la democracia y el socialismo son lo mismo. Ello fue comprendido por los Founding Fathers cuando partieron del criterio fundamental de que las mayorías no tenían el derecho a violar los derechos de las minorías.

Por ello Madison escribió: "Tales democracias han sido siempre incompatibles con la seguridad personal y los derechos de propiedad". Me he referido a este punto pues en la actualidad parece que si se vota hay democracia, y así se ignora que el denominado Estado de Bienestar europeo es la causa de la crisis que enfrenta la Unión Europea.

Al respecto en otro artículo de Foreign Affairs "Como salvar a la Unión Europea de la irrelevancia", el autor sostiene que "muchos europeos ya no asocian a la UE con la libertad y la oportunidad, en su lugar la culpan por la pena financiera". Y por ello la mayoría de los países de la Unión Europea se niegan a aceptar la política de austeridad propuesta por Alemania.

Creo importante recordar la sabia observación de Balynt Vasony: "La filosofía política angloamericana y la francogermánica son tan diferentes como el día y la noche". Y por ello insisto que en la medida que no comprendamos esa diferencia, difícilmente podamos comprender la naturaleza de la libertad y la creación de riqueza, respecto a la pobreza y el atraso de los países en desarrollo. Y en ese sentido no puedo menos que recordar las sabias palabras de Alberdi en carta a Sarmiento donde le dijo: "Hay una barbarie letrada mil veces más desastrosa para la civilización verdadera que la de todos los salvajes de América". Y a los hechos me remito.