Solidaridad del cuerpo diplomático hacia Sullivan en una reunión donde la Legislatura distinguió al CARI

El encargado de Negocios de la Embajada de los Estados Unidos, Kevin Sullivan se transformó, casi a su pesar en la noche del miércoles, en la figura de una comida que organizó el Consejo Argentino para las Relaciones Internacionales (CARI) en un salón del barrio de Recoleta.

Si bien la reunión tuvo carácter protocolar, ya que el CARI fue distinguido por la Legislatura porteña por su trayectoria en el campo de la política exterior, durante la cena anual que reunió a 300 invitados, Sullivan se llevó todos los comentarios y abroqueló al cuerpo diplomático a su alrededor, tras la citación y las críticas que recibió del Gobierno por sus declaraciones sobre el default.

Sullivan, quien fue uno de los más puntuales en llegar y compartió la mesa con el embajador de Venezuela, trató de minimizar el episodio, aún entre colegas, pese a que conversó con los embajadores de varios países que le expresaron su "solidaridad" (España, Brasil, Alemania, Rusia, Francia, Alemania y el Reino Unido, entre otros). 

Según una fuente, en todos los casos el funcionario dejó traslucir que se había "sorprendido" por el llamado a la Cancillería y señaló que su comentario sobre el default y la falta de inversiones había sido hecho "con intención positiva".

La cena anual del CARI reunió a dirigentes políticos, diplomáticos y funcionarios, además de empresarios y académicos, entre ellos Federico Pinedo, Roberto Lavagna, Jorge Domínguez, José Octavio Bordón y Ricardo López Murphy.

Al recibir el diploma de la Legislatura de manos de los legisladores Jorge Taiana (FPV) y Oscar Moscariello (PRO), el presidente del CARI, Adalberto Rodríguez Giavarini rescató la "amistad cívica" que representa la institución al agradecer la distinción en memoria de Carlos Muñíz, fundador de la entidad.

El ex canciller puntualizó en su discurso que "la política exterior es una de las llaves principales para el desarrollo económico y social".

Otro comentario muy escuchado en las mesas tuvo que ver con la interpretación que los asistentes le daban a la visita que hará el próximo sábado la presidenta Cristina Fernández al papa Francisco.

Muchos se jugaban que será un apoyo por su discurso de la otra semana en la ONU, incluido el tema de los fondos buitre, mientras que otros asistentes planteaban que el Papa apuntará a "contenerla" para que se preserve la gobernabilidad, dándole crédito a los dichos del sacerdote Guillermo Karcher, uno de los encargados del protocolo en el Vaticano.