Capitanich advirtió que "suspensión no significa despido"

El Gobierno minimiza la crisis del sector automotriz y responsabiliza a Brasil

El jefe de Gabinete resaltó los planes de la firma Toyota para aumentar el nivel de producción de autopartes nacionales, pero aclaró que "otras empresas tienen mayor dependencia relativa de la demanda externa, principalmente de Brasil".

El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, advirtió hoy que "suspensión no significa despido" al referirse a la situación del sector automotor, y volvió a vincular la caída de la actividad con la demanda externa y "principalmente de Brasil".

El jefe de ministros resaltó los planes de la firma Toyota para aumentar el nivel de producción de autopartes nacionales, pero aclaró que "otras empresas tienen mayor dependencia relativa de la demanda externa, principalmente de Brasil".

"Entendemos que son cuestiones de carácter transitorio por lo tanto suspensión no significa despido", subrayó Capitanich durante la habitual conferencia de prensa que realiza desde la Casa Rosada. 

El jefe de Gabinete destacó que "los niveles de producción durante la década han sido de una expansión extraordinaria y también del empleo y de la producción de autopartes".

Sin embargo, señaló que "el mercado mundial tiene fluctuaciones" y volvió a asociar los problemas actuales con la una "retracción notoria de la demanda de vehículos" en Brasil.

"Estas cuestiones de carácter circunstancial de suspensiones pueden resolverse en tanto y en cuanto podamos ir resolviendo los estímulos a la demanda interna y también a la externa", aseguró. El jefe de ministros recordó que existe un acuerdo con Brasil que "apunta también a un programa para los próximos cinco años, que implica la integración de la industria".

Las declaraciones de Capitanich se produjeron cuando se le consultó sobre la decisión de la automotriz Volkswagen de suspender a 900 operarios en su planta de Córdoba.