Ordenan desalojar a los presos que están en retenes en el penal de Devoto

A esa medida se comprometieron las autoridades del Servicio Penitenciario Federal (SPF) tras una visita sorpresa del Sistema de Coordinación y Seguimiento de Control Judicial de Unidades Carcelarias, según informó hoy la Defensoría General de la Nación.

El Servicio Penitenciario Federal (SPF) deberá trasladar a un sector adecuado a los detenidos del ex penal porteño de Villa Devoto que se encuentran alojados en retenes, sin camas ni baños, hasta que se los vuelva a colocar en un pabellón con esos elementos vitales.

A esa medida se comprometieron las autoridades del SPF tras una visita sorpresa del Sistema de Coordinación y Seguimiento de Control Judicial de Unidades Carcelarias, según informó hoy la Defensoría General de la Nación.

"Los detenidos alojados en 'retenes' del Complejo Penitenciario Federal de la Ciudad de Buenos Aires (ex Unidad 2 de Devoto) deberán ser trasladados, provisionalmente y hasta tanto se los realoje en un pabellón, a un salón de ese Complejo provisto de camas y sanitarios", se informó. 

Los integrantes del Sistema de Coordinación determinaron que los "retenes no son lugares para el alojamiento de las personas privadas de libertad, particularmente por la falta de higiene, sanitarios y camas", y se convino el traslado de los internos a salas que sean acondicionadas al efecto.

La visita sorpresiva la realizaron referentes de la Comisión de Cárceles de la Defensoría General de la Nación, junto a magistrados y fiscales -todos ellos integrantes del Sistema de Coordinación- a la sede ubicada entre las calles Bermúdez, Nogoyá, Desaguadero y Pedro Lozano, el único establecimiento penitenciario en funcionamiento dentro del territorio de la Ciudad de Buenos Aires.

Durante el recorrido del Complejo se advirtió que había 45 detenidos alojados en salas, conocidas como "retenes", que se ubican al ingreso de los pabellones y no cuentan con condiciones mínimas de habitabilidad ya que carecen de baño, camas, mesas, sillas, luz y ventilación, se explicó.

"En consecuencia, los internos deben hacer sus necesidades fisiológicas en baldes, botellas o bolsas, que permanecen junto con ellos durante todo el día. Incluso, durante el monitoreo los miembros del Sistema pudieron constatar como los detenidos debían convivir con estos baldes y bolsas, lo que conllevó que se sienta un fuerte olor nauseabundo en la mayoría de los 'retenes'", se detalló.

Frente a ello, la Comisión estableció que esos "retenes" no resultaban ser aptos para el alojamiento de las personas privadas de la libertad.

Las autoridades del Servicio Penitenciario Federal presentes (el Director de la Unidad, el Director General de Régimen Correccional y el Jefe de la Región Centro) "aceptaron los señalamientos realizados por los integrantes del Sistema y se comprometieron a trasladar a los internos a una sala de usos múltiples provista de camas y a una sala del Hospital especialmente acondicionada al efecto", se informó.

Los voceros dijeron que los penitenciarios "también se comprometieron a no habilitar los retenes para alojamiento en el futuro, efectuar revisiones médicas de cada interno trasladado y comunicar a los jueces de la causa de lo actuado".

De la visita participaron por la Comisión de Cárceles de la Defensoría General de la Nación Ricardo Richiello, Nicolás Toselli y Nuria Sardañons; por el Poder Judicial, el juez de la Cámara de Casación Penal y presidente del Sistema, Gustavo Hornos; el juez Sergio Paduczak y la Prosecretaria de Cámara Lucía Gallagher, y por el Ministerio Público Fiscal, el titular de la PROCUVIN, Abel Córdoba.