Crítica: "Los elegidos" y una familia aterrada por la presencia de fantasmas en su casa

Unos visitantes muy extraños

 

"Los elegidos" (Dark Skies). Estados Unidos, 2013. Dirección y guión: Scott Stewart. Fotografía: David Boyd. Música: Joseph Bishara. Actores: Keri Russell, Josh Hamilton, Dakota Goyo, Kadan Rockett y J.K.Simmons. Presenta: DCA. Duración: 97 minutos. Calificación: Para todo público.

Daniel (Josh Hamilton) y Lacey Barrett (Kari Russell) están en problemas. Daniel, arquitecto se quedó sin trabajo y el drama de los gastos y el pago de la hipoteca se acumulan. Lacey se dedica a la venta de propiedades pero a veces tiene oleadas de sinceridad y critica desfavorablemente sus ofertas y sus casas no se venden con facilidad.

En cuanto a los chicos, también les están trayendo algunos problemas. El mayor, Jesse (Dakota Goyo) en plena preadolescencia, con amigos discutibles a los que le gustan las escopetas de aire comprimido más de lo normal y el más pequeño Sam (Kadan Rockett), con pesadillas extrañas de las que los padres desconfían.
Inesperadamente las cosas comienzan a cambiar de lugar, las luces se multiplican solas y entre otros hechos extraños, aparecen objetos de cocina desparrados en el living durante la noche.

Para colmo el más chico comienza a dibujar señores altísimos que lo llevan de la mano. Tan seguro como que uno más uno es dos, hay espíritus de otro mundo rondando, o alienígenas interesados en la familia. Como padre cuidadoso, Daniel decide defender a los suyos y se compra un perro y una linda escopeta.

LAS PROMESAS
La película prometía más. Había cierto suspenso, uno siempre estaba esperando el dentellazo pero nada, no pasa nada, salvo algún que otro dibujo y un especialista que ratifica lo que los padres imaginan.

El filme recuerda ciertas películas clase b, como "El día que paralizaron la tierra", arqueológico testimonio de que los "Encuentros del Tercer Tipo" pueden existir.

"Los elegidos" tiene antecedentes de las películas mencionadas, a las que se suman influencias, de otros filmes, como "Los pájaros", de Alfred Hitchcock, con bicharracos que se estrellan en bandada en la casa de los pobres Barret.

Con alguna pretensión alegórica, sucede el 4 de julio, en un momento en que el americano medio defiende como puede a su familia de extranjeros desconocidos. La película está correctamente interpretada y mantiene el interés, a partir de las actuaciones de Kari Russell (Lacey), la madre y el pequeño Kadan Rockett, en el papel de Sam, el hijo menor.
Calificación: Buena