Se trata del templo San Ignacio de Loyola, ubicado a metros de Plaza de Mayo

Cinco alumnos del Nacional causaron graves destrozos en la parroquia más antigua de Buenos Aires

Así lo confirmó Nicolás Cernadas, del Centro de Estudiantes, quien horas antes lo había negado. Sin embargo, aclaró que el episodio fue llevado a cabo a espaldas de la agrupación, y que tuvo la intención de "desprestigiar la toma".

La parroquia San Ignacio de Loyola, el templo más antiguo de Buenos Aires, sufrió hoy un ataque vandálico perpetrado por cinco alumnos del Colegio Nacional Buenos Aires, según reconoció el propio centro de estudiantes de esa institución educativa.

En el lugar se realizaron pintadas "ofensivas", causaron numerosos destrozos e intentaron prender fuego los bancos de la iglesia jesuita ubicada a metros de Plaza de Mayo, tras acceder por un túnel desde el Colegio Nacional de Buenos Aires, que permanece tomado por los estudiantes.

Nicolás Cernadas, del centro de estudiantes del Colegio Nacional de Buenos Aires, dijo que un grupo de "cinco alumnos" de ese establecimiento reconoció la autoría de los destrozos que se realizaron en la Iglesia San Ignacio.

"Repudiamos los hechos", dijo el vocal del centro de estudiantes que agregó que quienes realizaron los destrozos "reconocieron los hechos".

"Se trató de un grupo minoritario que lo hizo a espaldas del centro de estudiantes", dijo y consideró que "lo hicieron adrede para desprestigiar la toma" contra la reforma educativa en la Ciudad.

Esta madrugada, aparecieron pintadas en el suelo frente al altar de la iglesia de San Ignacio y el sillón sacerdotal fue quemado y arrojado sobre un banco.

Cernadas señaló que "esto vino a afectar la toma contra la reforma educativa, pero consideramos que hay que estar más firmes que nunca y sin desviar el eje".

"Esto es una lucha contra la reforma educativa en la Capital Federal, junto con los demás secundarios afectados", agregó el vocal del centro de estudiantes.

Al ser interrogado por la prensa sobre la identidad de los alumnos que realizaron los destrozos, Cernadas se negó a dar el nombre de los estudiantes involucrados, al señalar que "no nos corresponde entregar a nuestros compañeros que hicieron algo equivocado".

"Lo vinculamos con la toma del Colegio Nacional Buenos Aires", manifestó Alberto, sacristán de la iglesia católica ubicada en Bolívar 225, la arquidiócesis del hoy papa Francisco, antes de que los alumnos confesaran la autoría del episodio.

El hecho se registró después de las 5 de hoy, cuando los agresores rompieron un candado de una puerta que divide la iglesia del colegio y forma parte de la Manzana de las Luces.

En el templo prendieron fuego una silla, a la que ubicaron patas para arriba entre los bancos donde se sientan los feligreses durante las misas.

Además, los alumnos usaron pintura blanca para escribir en el piso, adelante del altar, tres leyendas: "La única iglesia que ilumina es la que arde", "Hipócritas" y "Ni Dios ni amo".

"Cuando bajamos a abrir la iglesia encontramos humo y daños", indicó el sacristán a Crónica TV. También dijo que los agresores "entraron por un túnel que hay del colegio para la iglesia".

"Ayer pusimos un candado nuevo y lo rompieron", sostuvo y agregó que el mismo día vieron "a dos chicos que salieron corriendo" en dirección al establecimiento educativo.

Esta mañana estuvieron el vicario general de Buenos Aires, monseñor Joaquín Sucunza, y el rector de la catedral, sacerdote Alejandro Russo, para evaluar los daños junto al párroco del templo, Francisco Baigorria.

La iglesia de San Ignacio se remonta a la llegada de los primeros jesuitas a Buenos Aires, en época del gobierno de Hernandarias.

La primera construcción estuvo emplazada en la hoy Plaza de Mayo y bajo la advocación de Nuestra Señora de Loreto, pero en 1610, al ser beatificado el fundador de la Compañía de Jesús, fue rebautizada como San Ignacio de Loyola.

En 1661, por razones de seguridad y defensa del fuerte de la ciudad, los jesuitas abandonaron la construcción de Plaza de Mayo y se trasladaron al solar delimitado por las actuales calles Perú, Bolívar, Alsina y Moreno, propiedad de una hacendada mujer que había enviudado sin hijos.

El templo actual data de 1675, cuando se inauguró la segunda iglesia, también de adobe. El templo hoy afectado tiene más de 300 años de antigüedad. En 1942 fue declarado Monumento Histórico Nacional. El 16 de junio de 1955, el edificio fue atacado por simpatizantes del presidente Juan Domingo Perón, quienes también incendiaron la Curia Eclesiástica y otras nueve iglesias de Buenos Aires.