Tabaré Vázquez pidió disculpas y anunció que se retira de la política

El ex presidente de Uruguay Tabaré Vázquez se disculpó por su hipótesis de guerra contra la Argentina a raíz de la pastera y anunció su renuncia a la política, mientras que el gobierno de José Mujica aclaró que "es excelente la relación" entre ambos países.

Vázquez explicó que sus declaraciones fueron "inoportunas" y precisó que en ningún momento intentó dañar la relación entre ambos países así como "al proyecto político de la izquierda uruguaya, y al propio Frente Amplio", el partido de oficialismo que encabeza Mujica.

La senadora por el Frente Amplio y esposa de Mujica, Lucía Topolansky, calificó hoy como "infelices" los dichos del ex mandatario y admitió que "descolocaron" a los referentes del oficialismo, en tanto el secretario de la Presidencia del Uruguay, Alberto Breccia, remarcó que no se verán afectadas las "excelentes relaciones" entre Uruguay y la Argentina.

Vázquez, por su parte, difundió un comunicado en el que se disculpa públicamente por señalar que durante su presidencia analizó la posibilidad de un enfrentamiento bélico con la Argentina, a raíz del conflicto que se desató por la instalación de la planta de celulosa en las costas del Río Uruguay, en la ciudad uruguaya de Fray Bentos.

El ex presidente remarcó que dichas afirmaciones las realizó "teniendo en cuenta, además, las excelentes relaciones que felizmente hoy tienen nuestros dos países hermanos".

Vázquez indicó que "de cualquier manera, y muy lejos de mis intenciones, las mismas pueden dañar esas relaciones, al proyecto político de la izquierda uruguaya, y al propio Frente Amplio", y subrayó que "por todo ello presento mis excusas y anuncio mi retiro de la actividad política pública".

"Fueron palabras infelices que provocaron un revuelo político no deseado en el momento del procedimiento en la forma de encarar las relaciones (Argentina-Uruguay) que había reinaugurado el presidente Mujica que demostró en los hechos la viabilidad de entendimientos, que no habían sido posibles antes", evaluó Topolansky.

La legisladora admitió que lo que más la "preocupó" fue la "hipótesis de que Vázquez haya pensado en el apoyo del presidente (George) Bush, que era un hombre absolutamente bélico".

"A nosotros nos descolocó totalmente, no teníamos idea que esta cuestión tenía ese abanico de hipótesis y la búsqueda de ese respaldo", en Estados Unidos, añadió Topolansky.

Sin embargo, la primera dama remarcó que el planteo de Vázquez "no responde a la filosofía del partido de Gobierno ni a la idiosincrasia del uruguayo".

Por su parte, Breccia justificó la postura de Vázquez al advertir que "cualquier gobierno responsable, aún en la situación que no pasa nada, plantea escenarios posibles; (los mandatarios) siempre tienen que estar adelantándose 8, 10, 15 movimientos de lo que puede suceder en el escenario internacional".

Luego, remarcó que la polémica "es mucho más una interna que otra cosa", porque recordó que Vázquez era uno de los posibles candidatos para suceder a Mujica, y remarcó que "las relaciones entre el gobierno de la señora Cristina Fernández de Kirchner y el de Mujica, mucho más allá de la formalidad y de los encuentros diplomáticos, transcurre también por carriles de contactos permanentes y diarios".