Los barcos de la OTAN comienzan a supervisar el embargo de armas a Libia

Ya se encuentran un buen número de medios navales de la OTAN en el Mar Mediterráneo. Berlín se bajó de la misión. En tanto, la Alianza sigue discutiendo hoy su papel en la operación aérea.

Bruselas- Las fuerzas navales de la OTAN comenzarán hoy a patrullar el Mediterráneo para supervisar el embargo de armas impuesto sobre Libia.

Así lo confirmaron fueras de la organización. Tras la decisión política tomada ayer por los 28 socios de la Alianza, la ejecución de esa misión marítima se iniciará hoy con el fin de impedir la entrada de armamento en territorio libio.

Un buen número de medios navales de la OTAN se encuentran ya desde hace días en la zona central del Mediterráneo, a donde fueron trasladados para misiones de vigilancia.

En la misión no participarán las fuerzas de Alemania, que ha ordenado retirar todas sus naves de las operaciones de la OTAN en el Mediterráneo a pesar de haber dado luz verde a los planes aliados.

Berlín se opone a intervenir activamente en Libia y, por ello, las dos fragatas y dos buques menores de la Marina alemana con un total de 550 hombres que se encontraban en el Mediterráneo han vuelto a ser puestos bajo mando germano.

También se ha ordenado la retirada de los hasta 70 militares alemanes que participaban hasta ahora como técnicos especialistas a bordo de aviones de reconocimiento AWACS de la Alianza para controlar el espacio aéreo en el Mediterráneo.

La aplicación del embargo de armas es la primera aportación efectiva de la OTAN a la acción internacional en Libia.

Mientras despliega sus barcos frente a la costa norteafricana, la Alianza sigue discutiendo hoy su papel en la operación aérea, que por ahora ha dividido a los miembros de la organización.

En este momento, según una fuente aliada, el debate avanza con "un ambiente positivo", después de que ayer Francia, Reino Unido y EEUU se pusiesen de acuerdo en que la OTAN juegue "un papel clave" en la estructura de mando de las operaciones militares.

A priori, la Alianza se ocuparía de coordinar las acciones militares para mantener la zona de exclusión aérea sobre Libia, mientras que a propuesta de París se establecería una "dirección política" conformada por los ministros de Exteriores de los países participantes en la coalición internacional, incluidos aquellos que no pertenecen a la OTAN.

Los detalles del reparto de funciones están aún por definir, pero algunos gobiernos, como el español, ya han apoyado una separación de los planos militar y político y se muestran "cómodos" con la fórmula planteada por Francia, según dijo hoy la ministra de Defensa, Carme Chacón.