Un ex coronel nicaragüense afirma que sandinistas financiaron a los guerrilleros que atacaron La Tablada

Victor Boitano al referirse al asalto al cuartel militar bonaerense, dijo: "El golpe que realizó Enrique Gorriarán Merlo fue financiado por nosotros en Argentina en el ataque al La Tablada".

Un ex militar nicaragüense aseguró que ese país centroamericano financió al grupo de guerrilleros dirigido por Enrique Gorriarán Merlo que en 1989 protagonizó un ataque al cuartel de La Tablada, en el Gran Buenos Aires.

La revelación del coronel retirado Victor Boitano, difundida aquí por Canal 26 se produjo durante una entrevista con la televisión de Miami donde el ex sandinista confirmó los vínculos entre el narcotráfico y la venta de armas en el continente.

En ese marco, dijo que el Frente Sandinista que en los '80 controlaba Nicaragua logró hacerse de "unos 300 millones de dólares" con la venta de drogas, trata de personas y armas y señaló que "el golpe que realizó Enrique Gorriarán Merlo fue financiado por nosotros".

"Hacia el norte va droga e inmigrantes y regresa drogas y dinero", acotó al referirse a los negocios sucios que realizaba ese grupo guerrillero en Centroamérica.

Y, al referirse al asalto al cuartel militar bonaerense, dijo: "El golpe que realizó Enrique Gorriarán Merlo fue financiado por nosotros en Argentina en el ataque al La Tablada".

Boitano ratificó que en las negociaciones de los guerrilleros sandinistas "también la droga esta vinculada a eso".
"Nos compraron 300 mil fusiles nuevos para armar a toda Latinoamérica pero al no lograrse armar, quedaron ahí y se pasaron a guerrilleros colombianos como las FARC", reseñó en otro tramo de su entrevista con el show María Elvira Live.

El intento de copamiento del cuartel de La Tablada fue protagonizado el 23 de enero de 1989 por un grupo de guerrilleros del llamado Movimiento Todos por la Patria que dirigía Gorriarán Merlo, quien falleció en 2006.

Gorriarán Merlo, el guerrillero fundador del ERP, fue acusado por comandar el grupo que asesinó en Paraguay al dictador nicaragüense Anastasio Somoza, tras lo cual trabó amistad con el jefe sandinista Daniel Ortega.

Meses atrás la Cámara Federal de San Martín dispuso que la muerte de los guerrilleros durante la recuperación del cuartel por parte del Ejército y fuerzas de seguridad no era delito de lesa humanidad por lo que no volverá a investigarse el caso.