Esperan que el Senado discuta el lenguaje de señas para integrar a hipoacúsicos

El proyecto impulsado por Claudio Morgado, titular de la Comisión de Discapacidad de Diputados, fue aprobado por unanimidad en esa Cámara en diciembre de 2008 pero caducará si este año no lo tratan los senadores.

El lenguaje de señas, que permite la comunicación de personas sordas e hipoacúsicas como un aspecto vital para su integración social, es un idioma que busca ser reconocido a nivel nacional a partir del proyecto de ley que tiene sanción en Diputados y espera tratamiento en el Senado.

El proyecto impulsado por Claudio Morgado, titular de la Comisión de Discapacidad de Diputados, fue aprobado por unanimidad en esa Cámara en diciembre de 2008 pero caducará si este año no lo tratan los senadores.

"Hay un tiempo de caducidad. Si no tiene tratamiento este año el proyecto pierde estado parlamentario, por eso es importante que se trate antes de diciembre", aseguró Morgado en diálogo con Télam.

La iniciativa sancionada en Diputados reconoce "en todo el territorio de la Nación Argentina la lengua de señas, comunicación viso-gestual, como idioma hablado por la comunidad sorda e hipoacúsica".

También define que el objetivo de la ley es "la remoción de barreras comunicacionales a fin de equiparar las oportunidades" de las personas con esa dificultad sensorial.

El lenguaje de señas, como cualquier otro idioma, es la herramienta que permite comunicarse, establecer relaciones, adquirir formación y aprendizaje y vivir integrado en la sociedad y la cultura, a la vez que es una de las condiciones para la igualdad de oportunidades.

De lo contrario, no sólo está obturado el derecho a la comunicación y a la civilidad sino que se deja en la desprotección, marginación y discriminación a este segmento de la población, que en Argentina supera las 400.000 personas.

"Las personas sordas se van retrayendo y terminan saliendo lo menos posible a la calle y quedan excluidas", dijo Morgado, quien tiene una hija con discapacidad auditiva, tras enfatizar: "esto es algo tan obvio, que el hecho de que no reconozcamos esta lengua da vergüenza".

En este sentido, indicó, es central la aprobación de la ley de la lengua de señas, incluida en los lineamientos de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.

Por su parte, Irene Haimovichi, madre de una niña hipoacúsica, impulsa junto con su marido una campaña de recolección de firmas a través de Internet.

"Somos los papás de una nena hipoacúsica. Desde esta experiencia conocimos la importancia que tiene el lenguaje de señas para la comunicación de las personas con discapacidad auditiva, es por eso que estamos impulsando" esta iniciativa, señaló.

Así comienza el texto de la campaña que hoy tiene gran cantidad de adhesiones enviadas a lenguadesenias@gmail.com.

Morgado explicó que "ésta es una ley marco con tres artículos que establece que la lengua de señas tenga reconocimiento oficial en todo el país".

La norma "tiene después varias instrumentaciones, en educación, justicia, en el código civil y procesal", precisó el diputado tras aclarar que a partir de su reconocimiento oficial trabajarán "con la comunidad de sordos en la administración de esta lengua".

El lenguaje de señas es internacional ya que fue reconocido como idioma por el parlamento sueco en 1981 y dos décadas después el Comité de Ministros del Consejo de Europa lo aceptó como un medio de comunicación natural y completo para "facilitar el acceso a la educación, el empleo y la justicia".

En América Latina los países que reconocieron legislativamente la lengua de señas son México, Uruguay, Cuba y Colombia.