La Presidenta Cristina Fernández de Kirchner y su par Dmitri Medvedev coincidieron en la necesidad de tener avances conjuntos

Argentina y Rusia buscarán profundizar las relaciones bilaterales

La Jefa de Estado e pronunció por un cambio en las relaciones internacionales donde "se sustituya la noción de subordinación por la de cooperación". Se firmaron acuerdos de carácter energético (que incluye la construcción de un gasoducto), comerciales, industriales, tecnológicos y de transporte, entre ellos el Tren Trasandino.

La presidenta Cristina Fernández de Kirchner abogó hoy por "acentuar y profundizar" las relaciones entre la Argentina y la Federación Rusa y se pronunció por un cambio en las relaciones internacionales donde "se sustituya la noción de subordinación por la de cooperación".

Fernández de Kirchner y su par ruso, Dmitri Medvedev, firmaron hoy un acuerdo de asociación estratégica y avanzaron en acuerdos de carácter energético (que incluye la construcción de un gasoducto), comerciales, industriales, tecnológicos y de transporte, entre ellos el Tren Trasandino.

La primera mandataria sostuvo que la cooperación en ese tipo de proyectos "puede ser verdaderamente revolucionario" y, tras pedir "perdón" por la utilización de ese término en la cuna de la revolución comunista, remarcó que "estamos en Rusia y no estaría mal hablar también que algunas cosas pueden revolucionar el mundo".

En el cierre de su visita oficial a Moscú, la jefa de Estado consideró que las relaciones bilaterales "deben ser multiplicadas en 10 ú 15 veces" y aclaró que "no sólo debe ser comercial", al tiempo que bregó por avanzar "en la articulación de políticas y cosmovisiones de cómo se deben desarrollar las relaciones internacionales".

Luego de afirmar que Argentina ni Rusia tienen responsabilidad en la actual crisis económica, que consideró el "resultado de desaguisados y de malas políticas" donde "unos pocos resolvían por el resto", Fernández de Kirchner reiteró el reclamo por forjar un mundo "multipolar y multilateral".

Subrayó que es necesario "cambiar las actuales reglas internacionales en materia de economía, finanzas y seguridad" y sentenció que hay que "sustituir la noción de subordinación por el de cooperación".

"Es muy malo vivir en un mundo que no tenga reglas, pero es mucho peor vivir en un mundo donde las reglas sólo sean respetadas por los débiles y violadas por los más poderosos", aseveró.

En la misma línea, el presidente de la Federación Rusa remarcó que debe plantearse una nueva arquitectura financiera internacional, con mayores resguardos para evitar crisis como la actual, y remarcó que debe implantarse "un mundo multipolar, donde no haya el dominio de un solo país".

Medvedev remarcó la necesidad de que se apliquen medidas concretas para revertir los efectos de la crisis mundial y de la recesión que sacude a las economías más poderosas del planeta y que se irradia al resto.

Respecto a la relación con Argentina, el jefe de Estado señaló el interés de la Federación Rusa de avanzar en los convenios bilaterales e invertir en proyectos de magnitud como la construcción de un gasoducto para transportar el fluido desde Bolivia y el Tren Trasandino.

El gobernante ruso también destacó la importancia de "equilibrar los intereses" de los productores agropecuarios y los consumidores rusos, para seguir fomentando las exportaciones argentinas en ese campo.

Finalmente, Medvedev confirmó el interés de su país en fortalecer su presencia en América Latina que dejó en claro en la reciente visita que realizó a la región.

En su segundo día de visita oficial a Rusia, la mandataria argentina se reunió primero a solas con Medvedev, y luego se realizó un encuentro ampliado con los miembros de la comitiva argentina.

Por parte de Argentina, participaron de la reunión ampliada con los funcionarios rusos el canciller Jorge Taiana; los ministros Julio de Vido (Planificación) y Débora Giorgi (Producción); los gobernadores de Mendoza, Celso Jaque; y de Santiago del Estero, Gerardo Zamora; el embajador Leopoldo Bravo y el vocero presidencial, Miguel Nuñez.

Entre los acuerdos firmados en el salón de Malakita, se encuentran un memorando de entendimiento entre el Banco Regional de Rusia y el BICE, un acuerdo de cooperación de asistencia técnica entre el servicio minero de la Argentina y el Instituto minero de Rusia, y otro de entendimiento por servicio fitosanitario entre Argentina y Rusia.

Asimismo se suscribió un memorando de entendimiento para cooperación de uso pacífico de energía nuclear, y otro entre el ministerio de Planificación Federal y el ministerio de Energía del gobierno ruso.

Finalmente, hubo también firma de acuerdos entre la Unión Industrial Argentina y la Unión de Industriales y Empresarios Rusos, que firmaron sus titulares, Juan Lascurain y Alexander Shokhin respectivamente; y otro para el arbitraje internacional entre la Cámara Argentina de Comercio -rubricado por su vicepresidente primero, Eduardo Eurnekian- y la Cámara de Comercio y Federación Rusa, firmado por Yeugeny Primakar.

La jornada de hoy había comenzado más temprano, cuando la mandataria argentina depositó una ofrenda floral al soldado desconocido, sobre la muralla del Kremlin, a la vuelta de la Plaza Roja.

DECLARACION CONJUNTA

La declaración consigna acuerdos en torno a "la necesidad de afianzar los principios básicos para la convivencia y estabilidad de las naciones", entre los cuales destaca "la plena observancia de la Carta de las Naciones Unidas y de los principios y normas universalmente reconocidos del Derecho Internacional".

Entre otras coincidencias, subraya el apoyo al "multilateralismo", ante todo en el marco de la ONU y la "búsqueda de soluciones pacíficas a los conflictos entre los Estados y a los nuevos problemas de un mundo multipolar en formación".

También acuerda en el reclamo argentino sobre la soberanía en Malvinas "conforme al mandato" de la ONU y en torno al "cumplimiento de los acuerdos elaborados" por Medvedev y el presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, en nombre de la Unión Europea, respecto de la situación en el Cáucaso ex soviético.

Cristina y Medvedev "expresan su satisfacción por el desarrollo de las relaciones entre los dos países en las esferas política, económico-comercial, científico-técnica, cultural y humanitaria, testimonio de la amistad histórica y el respeto mutuo entre sus pueblos y declaran su intención de establecer relaciones de asociación estratégica", puntualiza la declaración.

Se comprometieron además a "profundizar el diálogo" en el tratamiento de "la agenda internacional" y a desarrollar "relaciones bilaterales multifacéticas con el propósito de coadyuvar a una cooperación mutua que redunde en beneficio del bienestar y progreso de sus pueblos".

La declaración conjunta constata "con satisfacción la convergencia de posiciones en la consolidación de la democracia como garantía del pleno respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales" y la intención de trabajar junto a "otros Estados en la consecución de este objetivo".

También se pronuncia por "la reforma de las Naciones Unidas, consolidar su autoridad y eficiencia sobre la base del más amplio consenso" y subraya en especial la importancia de lograr la reforma de su Consejo de Seguridad, "para que tenga una representatividad más amplia y sea más eficiente y transparente".

"En ese contexto, la Federación de Rusia y la República Argentina están dispuestas a apoyar las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas", señala.

La declaración saluda, en ese marco, "la invitación para que la Federación Rusa recibiera el estatus de Observador ante la Asociación Latinoamericana de Centros de Entrenamiento para Operaciones de Paz (ALCOPAZ)".

La declaración promueve un nuevo impulso "al proceso de negociación multilateral en la esfera del desarme" y sostienen que el "Tratado de No-Proliferación Nuclear (T.N.P.) es una pieza fundamental del sistema contemporáneo de seguridad", que debe lograr "carácter universal".

En este punto, reafirma tanto "el derecho inalienable de todos los Estados participantes en el Tratado al uso de la energía atómica para fines pacíficos", como "la necesidad de que se observen los compromisos pertinentes de la no proliferación" y se consolide el sistema de salvaguardias de la OIEA.

"Los dos presidentes pusieron de manifiesto que es indispensable no permitir la instalación de armamentos en el espacio ultraterrestre y desarrollar los usos pacíficos del espacio", expresa otro de los puntos salientes de la declaración.