Alfred Jarry desde un raro enfoque telúrico

Formado en 1991 por el argentino César Brie -discípulo del director italiano y uno de los precursores del llamado "teatro antropológico" Eugenio Barba-, la compañía El teatro de los Andes, vive y trabaja en Yotala, una población cercana a Sucre, Bolivia, donde tienen un teatro granja. "Ubú en Bolivia" se presenta en el marco de la muestra IV Programa Iberoamericano de teatro, que se realiza en el Cervantes y en la que ya actuaron La Compañía Nacional de Teatro Clásico -de España- y el Teatro camino, de Chile. Escrita en 1896, "Ubú rey" es la primer obra del francés Alfred Jarry (1873-1907) y se la considera un texto clave para el surrealismo, asimismo es un válido antecedente del llamado "teatro del absurdo". De áspera y grotesca presencia el rey Ubú y su mujer madre Ubú le sirvieron a Jarry, su autor, para cuestionar el poder depositado en las denominadas clases burguesas, o los gobernantes de turno. Los dos personajes representan aspectos tan negativos como la ignorancia, la ambición y abuso de autoridad. El director, actor y adaptador César Brie aprovechó el discurso que propone el texto de Jarry para realizar una lectura sobre la miseria y la violencia social, que tiñen el continente latinoamericano. El resultado de ese trasvasamiento cultural acerca la propuesta a los contenidos del teatro popular. O a esa teatralidad inmersa en las murgas de carnaval, en las que a través de sus textos breves, frases, o cantos, dichos por algunos de sus integrantes, unidos a los sonidos de percusión y la danza, se convierten en irónicos, corrosivos y satíricos "voceros" de una época. UN DIVERTIMENTO "Ubú en Bolivia" es un divertimento teatral, con elementos festivos y humorísticos y una constante reiteración de situaciones, que no siempre atrapan al espectador a través de su estilo directo y sin sutilezas. El espacio escénico elegido por César Brie para su obra es similar al utilizado por Eugenio Barba en sus últimos espectáculos. "Ubú en Bolivia" exigió que público y actores ocuparan un mismo ámbito: el escenario de la sala mayor del Cervantes. En ese lugar y sobre un gran rectángulo con piso de goma negra, en cuyos lados más amplios se ubicaron los espectadores, los actores desarrollaron la obra utilizando un acentuado despliegue físico y un juego escénico que incluyó elementos del grotesco y hasta del género bufonesco, siempre acompañados por sonidos de percusión, o música del altiplano. La propuesta de César Brie de características simples y con un humor y estilo casi ingenuos, hizo recordar el teatro de contenido social y político que se practicaba hace tres décadas atrás. Con instrumentos de percusión, algunas colchonetas y rollos de papel higiénico, entre otros objetos, Brie y su grupo mostraron un trabajo que mucho tiene de lúdico y les permitió exhibir el entrenamiento físico de sus integrantes, cuyo mayor lucimiento radica en la espontaneidad y la singularidad de sus juegos escénicos casi infantiles. Los próximos grupos a presentarse dentro del IV Programa iberoamericano de teatro a partir de los primeros días de marzo, son: Producciones imperdibles, España, con "Un poeta en Nueva York", del 1 al 4; el Teatro Do Grupo Sobrevento, de Brasil, con "Beckett", del 1 al 11 y la compañía Me xihc co Teatro, con "Muerte", del 8 al 11. Juan Carlos Fontana