Dos kamikazes llevaron en la mano explosivos y los detonaron en un café y un mercado de la supervigilada "zona verde"

Audaz ataque de Al Qaeda en Bagdad

Hubo 10 muertos en los atentados, cuatro guardias de seguridad estadounidenses. Entre los heridos, hay dos funcionarios del Departamento de Estado. Decapitaron a un conductor turco.

Bagdad (ANSA, EFE y AP) - En un ataque sin precedentes en Irak, dos insurgentes de una colateral de Al Qaeda penetraron ayer en la llamada zona verde, el área más vigilada de Bagdad que alberga la embajada de Estados Unidos y la sede del gobierno interino iraquí, y detonaron dos bombas que dejaron un saldo de diez muertos, entre ellos cuatro norteamericanos. La información oficial indica que se trató de ""una operación suicida"". La primera explosión se registró en el zona verde café, local al que acuden con frecuencia los soldados norteamericanos y los civiles que trabajan en el recinto, y la segunda destruyó parte de un popular mercado, según Sahren Walker, portavoz del mando militar estadounidense en Bagdad. En un principio se habló de disparos de mortero o coches bomba. Pero militares estadounidenses dijeron que fueron bombas ""llevadas a mano"". De ser así, sería la primera vez que los insurgentes se infiltraron y realizaron atentados dinamiteros en el corazón de la jefatura del país. El ataque, que causó una densa columna de humo negro que se podía ver desde varios kilómetros de distancia, suscitó temores acerca de la seguridad en la zona verde. El grupo grupo Tawhid Wal Yihad (Monoteísmo y Guerra Santa), liderado por el jordano Abú Musab Al Zarqawi, reivindicó el ataque en un comunicado en el que calificó la operación como ""de martirio contra la embajada de Estados Unidos"". Los estallidos dejaron un saldo de diez muertos, cuatro de ellos norteamericanos y seis iraquíes, así como 18 heridos. Los estadounidenses muertos eran agentes de seguridad privados de la empresa DynCorp. Entre los heridos hay dos funcionarios del Departamento de Estado. Horas antes había estallado una bomba en el este de Bagdad, con un saldo de un soldado estadounidense muerto y dos heridos. REPRESALIA Según analistas, estos ataques están vinculados con las amenazas del premier interino iraquí, Iyad Alawi, de desatar un bombardeo de grandes dimensiones en Faluja, bastión de la resistencia sunnita ubicado a 60 kilómetros al oeste de Bagdad, si la población no entrega a Al Zarqawi. Un ataque aéreo estadounidense llevado a cabo ayer en esa ciudad destruyó tres viviendas y causó al menos cinco muertos y 16 heridos, según Saleh Janis Al Asaui, médico del hospital local, mientras que en la localidad de Qaim, en la frontera con Siria, murieron 15 soldados de la Guardia Nacional iraquí. Por otra parte, un video difundido en una página islámica de internet por el grupo Ansar Al Sunna mostró la decapitación de un conductor turco, identificado como Ramadan Elbu, secuestrado en Irak. En el video aparecen cuatro enmascarados. Dos de ellos arrojan al suelo al rehén, y un tercero le corta el cuello con un cuchillo, hasta decapitarlo.