Llega al país Teresa Ter Minassian

La jefa de la misión del organismo internacional definirá el paquete de ayuda internacional. El Congreso debe aprobar cuánto antes el presupuesto y la ley de reforma previsional.

Funcionarios del gabinete económico y equipos técnicos del Fondo Monetario Internacional (FMI) continuaron ayer revisando las cuentas públicas de la Argentina y la evolución de temas centrales como el Presupuesto 2001 y la reforma previsional para la conformación del blindaje financiero. Los encuentros con los funcionarios del FMI van adquirir más trascendencia a partir de hoy, cuando la titular de la misión de organismo multilateral, Teresa Ter Minassian, arribe hoy a las 10.30 a Ezeiza, procedente de Estados Unidos. La ronda de encuentros se inició el domingo por la noche y hasta el momento, además del estado de las finanzas de la administración central, se estudió el déficit provincial proyectado para el año 2000 y sus estimaciones para el 2001. La delegación del FMI permanecerá en Buenos Aires al menos un par de semanas, en momentos en que en el Congreso Nacional se discute el proyecto de ley de Presupuesto Nacional para el año 2001, una de las exigencias del organismo multilateral para anunciar un blindaje financiero para la Argentina. La iniciativa modificada por el Ejecutivo contempla una ampliación del déficit contenido en el proyecto original de 4.820 millones a 7.000 millones, medida que obliga adicionalmente a modificar la ley de responsabilidad fiscal. Por su parte, el secretario de Hacienda, Mario Vicens, admitió que los cambios presupuestarios fueron aprobados por el FMI y reconoció que la flexibilidad adoptada para las cuentas públicas surgió luego de que la rígida política de reducción de déficit fiscal no logró infundir confianza en los mercados, ni bajar la tasa de riesgo país. A raíz del desborde de la tasa de interés y los problemas de los países emergentes para acceder a los mercados de crédito, en distintos ámbitos de la comunidad internacional comenzó a especularse con que la Argentina no podría hacer frente a sus compromisos externos. A partir de allí el Gobierno encaró una negociación con el FMI, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), gobiernos extranjeros y actores locales como AFJP la construcción de un blindaje financiero que despeje cualquier duda. Como contrapartida a la disponibilidad de crédito, el Gobierno se comprometió a sancionar la reforma previsional, a la aprobación del presupuesto del 2001 e implementar la desregulación de las obras sociales. Fuentes gubernamentales aspiran a que la totalidad de las reformas se realidad entre la segunda y tercera semana de diciembre, fecha para la que se estima podría realizarse el anuncio oficial del monto y las condiciones del blindaje.