Tempestad tremenda en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires. Tan fuerte adentro, como afuera. El embate de los inflacionópatas del Congreso para anular los vetos presidenciales y los malos vientos desde Wall Street desplomaron al Merval. En pesos, cayó un 4,83% y cerró en 2.092.205. Medido en dólares CCL cayó un 5% a 1.608 puntos, muy lejos del récord de 2.400 unidades del 9 de enero. Más de siete meses de pesadilla para los inversores bursátiles.
¿Qué temen los agentes económicos? Dos cosas. Que la oposición destruya el superávit fiscal (pilar del plan económico de Milei-Caputo) a golpe de leyes que obligan a un mayor gasto público (como el incremento del financiamiento a las universidades o al Hospital Garrahan). Y en segundo lugar, a una derrota categórica del oficialismo en el provincia de Buenos Aires el 7 de septiembre. ¿Hace falta recordar que a los mercados no le gustan los populistas?
NUEVA YORK
En Nueva York, los papeles argentinos (ADR) también parpadearon en rojo, con la única excepción de Tenaris (+0,24%). Telecom se desplomó el -8,28%; Banco Frances, -7,83%; Banco Macro -7,62%. Una verdadera carnicería, potenciada por la caída de Wall Street y otros mercados emergentes, como Brasil.
Sorprendió la corrección de la empresa de mayor capitalización del mundo. Nvdia se dejó un 3,5%. ¿Fue un anticipo del balance trimestral que presentará en las próximas horas? Arrastró a otra acciones tecnológicas: Advanced Micro Devices (-5,4%), Broadcom (-3,6 %), y Palantir (la estrella de los últimos quince meses) resignó más de 9%.
A contramano de la tendencia tecnológica, cotizó Intel (+7%) después de que se confirmará el interés del Gobierno de Donald Trump por apuntalar al único fabricante de chips del territorio estadounidense, a cambio de una participación accionaria. Además (una cosa tiene relación con la otra) SoftBank anunció una inversión de 2.000 millones de dólares en la empresa de Sillicon Valley.
Así las cosas, el S&P 500 bajó un 0,59%, hasta 6.411 unidades; el Dow Jones de Industriales avanzó 0,02%, hasta situarse en 44.922 puntos, y el tecnológico Nasdaq cayó 1,46 %, hasta 21.314 enteros.
Las petroleras también sufrieron (YPF bajó 5,2% en Wall Street, a 31,98 dólares). El barril del crudo intermedio de Texas (WTI) cerró con una caída del 1,72 %, hasta los 62,33 dólares el barril, debido a la posibilidad de que Rusia y Ucrania se reúnan próximamente para negociar el fin de la guerra, con la mediación de Estados Unidos.
Brasil, como se dijo, tuvo un martes turbulento. El principal indicador de la bolsa de São Paulo retrocedió un 2,10%, lastrado -según la agencia EFE- por las pérdidas de los bancos y el temor a nuevas sanciones de Estados Unidos contra Brasil.
El real se depreció un 1,2% frente al dólar: acabó cotizado la divisa estadounidense a 5,499 R.
DOLAR, TRANQUILO
Mientras los inversores bursátiles se desangran, la pax cambiaria es una roca, gracias a las altas tasas de interés que ofrecen los bancos, ansiosos por fondearse para hacer frente al nuevo esquema de liquidez que impuso el Gobierno para reparar el zafarrancho que había causado con la desprolija e inorportuna desaparición de las LeFi del Banco Central, que, al menos, ordenaba el mercado de tasas interbancario.
El dólar minorista cotizó a $1.270 para la compra y $1.310 para la venta en la cotización de Banco Nación, una baja de cinco pesos respecto del cierre del lunes.
El dólar blue se mantiene estable. Piden en las cuevas de la City $1.340 para la venta. Lo mismo ocurría con el dólar mayorista, el de referencia del mercado y el comercio exterior, ubicándose en $1.292,5.
En cuanto a la caución, tocó el 45% anual a principio de la rueda y terminó, por segundo día consecutivo, por debajo del 2% (a un día), porque los bancos bajan la ventanilla anticipadamente para cumplir la exigencia diaria de encajes. A 7 días y 30 días cerraron en 30% y 42% respectivamente. El mercado de pesos sigue roto, coinciden los analistas. Y afecta a la producción vía tasas estratoféricas en descubiertos, saldos impagos y descuento de cheques. ¡Pobre aquella Pyme necesitada de financiamiento para capital de trabajo o proyectos de inversión!