En lo que respecta al índice del costo de la construcción (ICC) en el Gran Buenos Aires,
El incremento en los precios fue visto por los especialistas como una señal negativa dentro de un proceso inflacionario que parece haber recobrado cierto vigor. Al momento de hilar fino sobre los índices, se destaca que el incremento en los productos nacionales viene de la mano del impulso inflacionario general, algo que quedó en claro cuando el mismo Indec dio a conocer el último IPC minorista, que escaló a 3,8% en octubre.
En lo que hace al incremento de los precios pertenecientes a bienes o insumos importados, los especialistas han destacado que en parte es fruto de la visión estratégica de quienes decidieron adelantar compras y acumular stock ante el temor de que una devaluación no les multiplique de manera considerable los costos.
En cuanto al aumento en materiales de construcción, las razones también obedecen al retorno de la actividad a niveles de normalidad luego de haber estado paralizada durante muchos meses, en el contexto del aislamiento preventivo dictado por el Gobierno.
Si bien en lo que va del año el costo de la construcción creció 22,9%, los materiales casi duplicaron ese porcentaje al trepar 44,1% entre enero y octubre. En contraste, la mano de obra avanzó apenas 7,9% en un contexto de caída del empleo.