Economía

Retenciones cero: ARCA justificó el fin del régimen y habló de un “récord histórico”

El titular del organismo recaudador, Juan Pazo, aseguró que la medida cumplió su objetivo al registrar un récord de liquidación por US$7000 millones en apenas tres días. Sostuvo que el beneficio alcanzó a los productores y que ahora “será el área política la que deberá ajustar” para sostener el equilibrio fiscal.

El jefe de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), Juan Pazo, defendió la finalización del régimen de retenciones cero para las exportaciones agroindustriales, tras el ingreso de Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE) por US$7000 millones en tan solo 72 horas. El funcionario negó que la medida haya favorecido exclusivamente a las grandes cerealeras y aseguró que, en cambio, significó un alivio para los productores y un impulso para la liquidación de divisas.

“El esquema fue claro desde el principio: tenía como fecha límite el 31 de octubre o el tope de US$7000 millones, lo que ocurriera antes. Esa condición se cumplió y la medida terminó tal como lo establecía el decreto”, explicó Pazo durante una entrevista en el streaming La Casa.

El decreto 682 había dispuesto la eliminación temporal de las retenciones a las exportaciones de soja, maíz, girasol, otros granos y sus subproductos. La iniciativa buscaba incentivar la liquidación de divisas y dinamizar el mercado en un contexto de fuerte necesidad de dólares para las arcas públicas.

Pazo celebró lo ocurrido como un récord histórico: “Nunca vi retenciones cero en la Argentina y tampoco un volumen de liquidación semejante en tan poco tiempo. La suba en la cotización de la pizarra de la soja demuestra que este beneficio llegó directamente a los productores”.

Según el titular de ARCA, las grandes cerealeras no pudieron acaparar el beneficio porque no contaban con el stock necesario para aprovechar la medida, lo que obligó a las compañías exportadoras a salir a comprar a los productores. “Eso genera un diferencial positivo en el precio de la pizarra y es ahí donde se ve la ganancia para el sector primario”, apuntó.

Respecto al impacto fiscal, Pazo reconoció que la eliminación transitoria de retenciones implicó una merma de ingresos para el Estado, aunque relativizó su efecto. “El área política será la que deba ajustar para no comprometer el equilibrio fiscal. Lo importante es que este excedente se trasladará a la economía real, con mayor actividad y más dinamismo en las exportaciones”, señaló.

El funcionario recordó que el gobierno había anticipado que la meta de US$7000 millones podía cumplirse incluso antes de octubre, aunque admitió sorpresa por la velocidad del resultado. “Sabíamos que en esa ventana los productores iban a aprovechar la oportunidad, pero no esperábamos que se completara en 48 o 72 horas”, reconoció.

Consultado sobre el futuro de los derechos de exportación, Pazo evitó adelantar definiciones y pidió “prudencia” antes de tomar nuevas medidas. “Es necesario tener datos concretos, ver cómo se generó este movimiento y evaluar hacia adelante si corresponde volver a un esquema similar. Lo central es que los productores tengan certezas sobre el valor de su producto”, sostuvo.

La discusión sobre las retenciones cero abre un nuevo capítulo en la política económica. Mientras el oficialismo resalta el alivio inmediato para los productores y la entrada de divisas récord, sectores críticos advierten que la reducción de ingresos fiscales puede complicar el cumplimiento de las metas presupuestarias. En paralelo, los productores aguardan señales claras sobre la continuidad de un esquema que, aunque breve, generó un fuerte impacto en el mercado agrícola.