Opinión
A 70 años del golpe de Estado de 1955 (Entrega Nº 5 y última)
Los herederos de “La Libertadora”
Le tocó al tercer presidente de la autodenominada Revolución Argentina, teniente general Alejandro Agustín Lanusse, cerrar la etapa abierta en 1955. Desde el punto de vista político, aquel camino había fracasado. Perón pudo regresar al país; se le devolvieron los restos mortales de su segunda esposa, María Eva Duarte; el grado militar; los sueldos confiscados y se levantó la proscripción del Partido Justicialista.
ELECCIONES GENERALES
Lanusse había sido jefe de los Granaderos a Caballo, regimiento escolta presidencial, con Aramburu. Supo y participó del traslado de los restos secuestrados de Evita a un cementerio en Milán.
En su gabinete contó con el ex jefe de la Casa Militar de Aramburu, Francisco Manrique, que se desempeñó como ministro de Bienestar Social. Como vemos, tanto Lanusse como Manrique habían sido hombres de total confianza de Aramburu.
Lanusse levantó la prohibición de las actividades políticas, pero no pudo llegar a un acuerdo político con Perón para lograr una transición en la cual él mismo fuera la figura principal. Entonces convocó a elecciones generales para el 11 de marzo de 1973, pero estableció una cláusula proscriptiva para él y eventualmente para el General exiliado: si alguien quería ser candidato a presidente, el 25 de agosto de 1972, no debía ocupar cargo público alguno y estar en el país.
UDELPA Y HECTOR SANDLER
Abierto el juego, los partidos políticos se dieron a su reorganización. Udelpa fue uno de ellos y el ex diputado Héctor Raúl Sandler tuvo un papel protagónico.
Sandler había nacido en la Capital Federal el 9 de mayo de 1929. Hijo de una modesta familia de inmigrantes vieneses del barrio de Saavedra. Cursó sus estudios secundarios en el colegio industrial Otto Krause y una vez finalizados ingresó a la Escuela Militar de Aviación, de la cual egresó como alférez, en 1949.
Si bien su sueño juvenil era estudiar ingeniería aeronáutica, terminó estudiando Derecho; se recibió de abogado y pidió la baja de la Aeronáutica.
Cuando Aramburu fue a Córdoba a organizar Udelpa conoció a Sandler quien se convirtió en su colaborador en la provincia. En 1963 ocupó una banca, el único diputado de Udelpa por Córdoba.
Sandler admiraba a algunos clásicos de la economía política alemana. Eran los tiempos de la “economía social de mercado”, la teoría liberal en boga en los tiempos de Konrad Adenauer, el constructor de la Alemania de post-guerra.
Influido por Henry George, un economista, filósofo y periodista estadounidense, de gran popularidad en los Estados Unidos del siglo XIX, Sandler siguió la filosofía económica conocida como “georgismo”. Esta abogaba la creencia de que las personas deben ser dueñas del valor que producen, pero que el valor económico de la tierra y los recursos naturales deben pertenecer por igual a todos los miembros de la sociedad. George argumentó que un impuesto único sobre el valor de la tierra crearía una sociedad más productiva y justa.
En 1965 Udelpa sufrió una serie de fracturas que hizo que el partido encolumnado detrás de Aramburu quedara reducido y no pudiera, en las elecciones de renovación de cámaras, obtener ningún escaño. Ni siquiera Sandler pudo conservar su banca.
Tras la muerte de Aramburu, el partido quedó en manos de Sandler y ante el regreso a la política propuesto por Lanusse, reorganizó un Comité Nacional con la presencia de delegados de Córdoba, Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos, Capital Federal, Misiones, Santa Cruz, San Juan, Catamarca, Corrientes, Chaco y La Rioja.
Udelpa manifestó que la salida propuesta por el gobierno militar no era en sí misma la solución de los problemas nacionales, pero que sí era preferible a la continuidad del gobierno militar.
Sandler proponía aplicar una política impositiva que eliminara el impuesto a los réditos, al consumo y a las exportaciones, reemplazándolo por un impuesto único a la tierra, tanto urbana como rural.
En este giro a la izquierda, Udelpa busco un acuerdo programático y no coyuntural, con el ex gobernador bonaerense Oscar Alende. Así el partido que había nacido en la derecha del centro político argentino, se unió al Partido Intransigente, al Partido Revolucionario Cristiano de Horacio Sueldo y al proscripto Partido Comunista, en la Alianza Popular Revolucionaria, que llevó la fórmula de Alende-Sueldo a las elecciones nacionales del 11 de marzo de 1973. La APR resultó la cuarta fuerza electoral y Sandler volvió al Congreso como diputado de Udelpa, junto a Armando Molina Zavalía y Raúl Bajezmann.
La novedad de estas elecciones es que, detrás del peronismo y del radicalismo, quedó en tercer lugar la Alianza Popular Federalista, conformada por el flamante Partido Federal, creado por Francisco Manrique, y el Partido Demócrata Progresista. La fórmula estuvo integrada por Manrique y Rafael Martínez Raymonda.
Un volver a vivir la alianza política de Aramburu y los demoprogresistas de 1963.
Lanusse no pudo acordar con Perón. Sandler quedó al mando de un partido político minoritario, pero Manrique logró el tercer lugar tanto en las elecciones de marzo como en las de septiembre de 1973.
TIEMPO VIOLENTO
El nuevo tiempo institucional fue violento e inestable, sobre todo tras el fallecimiento del presidente, el 1 de julio de 1974. La violencia política y militarista no sólo provenía de las organizaciones armadas de la izquierda y del peronismo montonero, sino también desde la derecha del partido gobernante, desde el aparato estatal controlado por el ministro de Bienestar Social José López Rega, que anunciaba el terrorismo de Estado futuro.
Sandler, perseguido por la Triple A, sufrió un intento de secuestro el 9 de octubre de 1974, pero fue desbaratado por la acción eficaz de sus colaboradores. Esa noche pernoctó en el Congreso Nacional y días después partió a los Estados Unidos por unas semanas.
En Rosario, Udelpa vuelve a fragmentarse: el dirigente Fernando Scornik creó una agrupación llamada Udelpa-Liberación Nacional y el diputado Bajezmann se incorporó al bloque del oficialista Frente Justicialista de Liberación. Regresado al país, Sandler funda la Corriente Argentina Revolucionaria, ya nada quedaba de la vieja Udelpa. Terminará en un largo exilio mexicano.
Recuperada la democracia en 1983, Lanusse declaró contra el terrorismo de Estado en el juicio a las Juntas Militares; Sandler regresó del exilio y tras un fugaz intento de regresar a la política con un Partido del Pueblo, se retiró. Manrique se presentó nuevamente como candidato a presidente, junto al conservador puntano Guillermo Belgrano Rawson por la Alianza Federal. Obtuvo el quinto lugar y continuó con el periodismo televisivo.
En 1986 se incorporó al gobierno de Raúl Alfonsín como secretario de Turismo. Al año siguiente integró la lista de candidatos a diputados, como extrapartidario, de la UCR pero no asumió la banca. Murió en febrero de 1988.
En aquellas elecciones, el Partido Federal obtuvo una banca en el Concejo Deliberante porteño. Se inició una especie de antiperonismo de segunda generación.
El concejal fue diputado nacional, en 1997, por la alianza electoral que armó Domingo Cavallo. El gobernador Daniel Scioli lo hizo presidente del Banco de la Provincia.
Actualmente, Guillermo Francos es funcionario del exótico gobierno antiperonista de tercera generación.