Opinión
Historias del Conurbano

La puja China-EE.UU. que se proyecta sobre el Conurbano


Se cumplieron dos años del triunfo de Javier Milei en la segunda vuelta del 2023 que lo depositó en la Casa Rosada. Su irrupción en la escena política argentina, además de ser novedosa y extraña, llegó con una serie de conceptos muy afincados. Desde bajar la inflación como sea, la aplicación de la “motosierra”, la pelea contra la “casta” y en materia de política exterior, alineamiento irrestricto con Estados Unidos e Israel.
Podría decirse que de todas estas variables, la más cuestionada es la pelea contra la casta como si eso fuera realmente posible. En todo caso, se cambia una casta por otra. En el resto, es innegable que Milei avanzó en la dirección que prometió, al margen de los efectos secundarios que provocó y está provocando en la producción, el trabajo, la actividad y el consumo. El anuncio del acuerdo comercial con Estados Unidos sugiere un trasfondo que vale la pena examinar y sus implicancias en la pelea geopolítica que se da en el mundo que, incluso, llega a los rincones más recónditos del conurbano bonaerense.

El Congreso de los Estados Unidos acaba de presentar un trabajo técnico con 12 puntos destacados sobre los aspectos centrales del avance chino en el mundo y sus capacidades. Entre las conclusiones, apoyado por republicanos y demócratas, sostiene que “será responsabilidad de Estados Unidos contrarrestar la apuesta de Beijing por la hegemonía”. El alineamiento del gobierno de Javier Milei con el gobierno de Donald Trump implica una serie de desafíos en aspectos medulares de la influencia asiática que ha penetrado en estructuras de todo tipo. Incluso, se ha dado una política de acercamiento con los territorios del Gran Buenos Aires a través del desembarco e intercambio comercial de provincia a provincia o municipio a municipio.

DIRECTO A BEIJING

El caso más reciente se dio esta semana con el anuncio que hizo el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez, quien viajó a la provincia china de Fujian para abrir oficialmente la oficina comercial de la Unión Industrial de Merlo en Fuzhou. Se trata de un mercado de 45 millones de habitantes sólo en esa región de China. El caso de Menéndez no es el primero en el conurbano aunque quizá sí se trate del que más lejos ha avanzado con el desembarco de oficinas directamente en ese país.

Uno de los jefes comunales pioneros en la relación con comunas chinas es el alcalde de José C. Paz, Mario Ishii, quien lo comenzó a hacer apenas asumió su tarea en 1999.

Un hecho que para muchos pasó desapercibido, sucedió el año pasado, entre el 15 y el 17 de julio. En ese momento, se llevó a cabo en las universidades nacionales de Buenos Aires (UBA), Lanús (UNLA) y José C. Paz (Unpaz) el primer Congreso de Sinólogos Latinoamericanos, organizado en conjunto con el Centro Mundial de Sinología de la Universidad de la Lengua y la Cultura de Beijing, con la participación de especialistas de la República Popular China y de Latinoamérica. Lo más trascendente sucedió el día del cierre en la Universidad de José C. Paz, territorio gobernado por Ishii. La consigna del encuentro fue: “Hacia una comunidad de desarrollo compartido entre China y América Latina”. En el cierre estuvieron Axel Kicillof; el senador nacional, Oscar Parrilli, y el embajador de la República Popular de China en Argentina, Wang Wei. Ese día se anunció que en la Universidad se va a dictar una maestría en Políticas de Vinculación con China que será dirigida por Sabino Vaca Narvaja, exembajador argentino en Beijing.

Si bien el documento elaborado por el Congreso Americano no desarrolla puntualmente un ítem para América latina, sí hay varios pasajes donde la descripción permite contemplar el alcance de las preocupaciones de la administración republicana. En un párrafo, se describe que “China continúa sus esfuerzos para posicionarse como el socio confiable preferido para el comercio y la inversión, particularmente con los mercados emergentes”. ¿Qué rol ocupa Argentina? Al momento, el de un socio comercial en ascenso. Los datos así lo demuestran. Después de Brasil, China es el principal destino de las exportaciones argentinas, y de las importaciones también.

INDUSTRIA LOCAL

En tanto, el informe sostiene que “China ha asegurado el dominio en gran parte de los componentes heredados y avanzados para los productos tecnológicos de consumo y empresariales más prevalentes en la actualidad”. El tema es particularmente sensible porque se refiere al acceso a los minerales críticos conocidos como “tierras raras”. En el acuerdo comercial anunciado la semana pasada se menciona el tema de manera explícita. También impacta fuertemente en la industria local cuando sostiene: “El mundo enfrenta la amenaza de un Impacto chino 2.0, en el que la sobreproducción en industrias clave del sector manufacturero altamente subsidiado de China se expande hacia el exterior, causando un daño importante a las industrias de otros países”.

Estas cuestiones que hacen a la economía argentina, socavan las estructuras locales porque es donde se observan los primeros costos ante la caída de la producción por parte de las pymes que aún no ven la luz al final del túnel. Lo están sintiendo los municipios con la reducción de la recaudación en sus tributos de “higiene y seguridad”. Algo así como los ingresos brutos municipales. De allí su presión para que se les destine un monto fijo sin especificar el destino de ese dinero como moneda de cambio para habilitar el endeudamiento que pretende Axel Kicillof y que, por ahora, vuelve a asomar lejano.

En el largo escrito que hoy se discute en Estados Unidos y es la llave que tiene Trump para justificar que detrás de la prolongación de la guerra en Ucrania está la decisión de China de apostar por Rusia en la conformación de un eje que incluye a Irán y Corea del Norte, se esboza que “la exportación china del exceso de producción está socavando a los competidores globales y ganando cuota de mercado a lo largo de toda la cadena de valor, desde materias primas hasta insumos intermedios y productos terminados. El modelo económico de China limita cada vez más a otros países emergentes a las etapas de manufactura de menor valor agregado”.

Resultará interesante saber qué tiene la industria del conurbano para ofrecer a China en este contexto, o serán meras oficinas de importación. Incógnitas. Lo cierto es que lo que no entra por la política macro entendiendo los tiempos políticos que se viven, ingresa por lo micro. Es decir, las estructuras políticas locales.

Mientras tanto, en otras esferas ya se discute la trama de un nuevo eje político clave. El continente sudamericano se está reconfigurando con gobiernos que se muestran más cerca de Estados Unidos en su dialéctica y accionar. Si Javier Milei aparecía en soledad en el Conosur como interlocutor privilegiado de Washington, ahora la nueva realidad de Bolivia y la casi segura victoria de José Antonio Kast en Chile modificarían ese “privilegio”.

GEOPOLITICA

Es cierto que Argentina conserva “particularidades únicas como la entrada directa a la Antártida, el Atlántico Sur, Ushuaia como potencial puerta logística y la Triple Frontera como nodo crítico del terrorismo internacional, de sumo interés para Washington. Ninguno de esos puntos puede ser replicado por Chile”, sostienen expertos en geopolítica.

Y agregan que “la prioridad pasa por cerrar acuerdos antes de que Kast pueda ingresar formalmente al juego. La Base Naval Integrada de Ushuaia podría ser la pieza central. Estados Unidos entiende el valor del Polo Logístico Antártico como plataforma de proyección en un territorio donde la competencia entre potencias se acelera. La obra está demorada desde hace años”.

Pero también hay un aspecto que puede diferenciar a Argentina por sobre el resto para solicitar su eje con América. Y es la cooperación en Seguridad, Defensa e Inteligencia. El acuerdo con el FBI en la creación del Centro Nacional Antiterrorismo y la presencia técnica de agencias estadounidenses en la Triple Frontera consolidan a la Argentina como hub regional en materia antiterrorista.

“Estados Unidos diversificará aliados en Sudamérica, pero seguirá priorizando a quien ofrezca infraestructura estratégica, cooperación sensible y resultados inmediatos”, expresaron expertos en seguridad regional. Todo este tablero opera sobre el mapa político argentino que, como suele suceder, lo realmente importante no es lo que está en la superficie. Las peleas internas siguen vigentes. Aún faltan algunos capítulos por escribirse. Puertas adentro de la Casa Rosada y en las huestes del peronismo. Y, aunque no parezca, allí también se filtran intereses estadounidenses y chinos.