La Confederación General del Trabajo (CGT) definie en los próximos días si convocará a una movilización para el 7 de agosto en el marco del Día de San Cayetano, el patrono del pan y del trabajo, y si se adhiere a la tradicional marcha de los movimientos sociales.
En principio, la mesa chica de la CGT podría reunirse en los próximos días para formalizar la convocatoria a sumarse el 7 de agosto a la marcha que desde 2016 realizan los movimientos sociales a la iglesia de San Cayetano, en Liniers, heredera de la movilización que la CGT de Saúl Ubaldini realizó contra la dictadura el 7 de noviembre de 1981, con la consigna “Pan, paz y trabajo”.
“Hasta ahora no logramos nada porque el Gobierno no da muestras de querer negociar e incluso nos enteramos por los diarios de medidas como el cierre de Vialidad”, expresó un alto mando de la CGT. La cúpula de la CGT analiza subirse a la marcha a San Cayetano para recuperar el reflejo opositor y darle un mensaje tanto al Gobierno como a sus rivales internos.
La movilización por San Cayetano se lleva adelante desde 2016 y es convocada por los movimientos sociales. Durante la que se realizó en 2024, la marcha se realizó en paralelo a la celebración religiosa y los sindicatos denunciaron la "emergencia alimentaria, social y laboral" en el país. En tanto, previo a aquella movilización, el cotitular de la CGT Héctor Daer expresó el compromiso de la central obrera con todos los trabajadores y había advertido que la marcha sería un hito "que tiene que ver con lo que dignifica a todo ser humano que es el trabajo".