‘La Pilarcita’. Dramaturgia y dirección: María Marull. Asistente de dirección: Sofía Salvaggio. Escenografía: Alicia Leloutre, José Escobar. Iluminación: Matías Sendón. Vestuario: Jam Monti. Actores: Mercedes Moltedo, Luz Palazon, Pilar Boyle, Rodrigo Del Cerro. En El Camarín de las Musas
De obras como ‘La Pilarcita’, que ya van por su cuarta temporada y son un éxito del circuito off o independiente -o como quiera llamarse ese teatro que no busca público a cualquier precio-, parece haberse escrito todo. Pero ese texto, la puesta y las actuaciones merecen indagar, ahondar un poco más.
Por empezar, si algo puede decirse es que María Marull demuestra -tal como hace en ‘Hidalgo’- que sabe provocar emoción sin necesidad de grandilocuencias, ni nervios ni enojos. No. Lo de ella es la ternura entre mate y mate. Lo cariñoso, lo emotivo, lo contenedor.
Muy alejada, felizmente, de otros modelos, tanto de actuación como de dirección, Marull sabe cómo hacer y qué hacer para llegar al espectador.
SANTA POPULAR
Lo que recibe la platea, en principio, es la historia de una mujer que viaja con su marido -al que nunca vemos- a un pueblo de Corrientes en busca de un milagro. Lo hace para las fiestas de la santa popular del título. Allí se topará con coloridos personajes locales con quienes mantendrá un interesante cruce.
Claro, el encuentro con lo diferente es un tema del que también se ha escrito mucho. La maestría, por supuesto, está en lograr sacarle lustre. Contar lo ya contado con nuevas palabras. Y sobre todo hacerlo con verdad, de lo cual hay mucho en ‘La Pilarcita’. Genuino, sincero, honesto, el texto de Marull es casi imbatible.
Los actores, en tanto, también transmiten emoción y verdad. En la Celeste de Mercedes Moltedo, por ejemplo, se ve a una actriz desplegar y gozar con un personaje de esos que se llaman ‘‘agradecidos’’.
Ella sabe qué cuerdas tocar, cómo otorgarle vida y luminosidad. Tal vez como La Pilarcita, Celeste irradia un aura de luz a su alrededor que todo lo tiñe. A las excelentes actuaciones debe sumarse el gran equipo técnico y artístico: Alicia Leloutre y José Escobar en escenografía, Matías Sandón en iluminación y Jam Monti en vestuario.
Dice la gacetilla de prensa que ‘‘están los que creen que el milagro es algo que llega inesperada y arbitrariamente, y están aquellos que lo construyen día a día, casi de manera artesanal...’’.
‘La Pilarcita’ resulta un pequeño milagro del segundo estilo. Fruto del trabajo, la rigurosidad y el amor.
Calificación: Muy buena