El peronismo buscará renovar en las elecciones del domingo próximo el 50 por ciento de las bancas que pone en juego y alcanzar un centenar de escaños, mientras que el oficialismo aspira a tener cerca de 80 diputados para acercarse al tercio necesario para blindar los vetos presidenciales.
En los comicios del 26 de octubre se definirán 127 de los 257 escaños que conforman la Cámara de Diputados y será el primer test electoral que afronta el presidente Javier Milei en un escenario complejo después de haber perdido la iniciativa política en manos de la oposición parlamentaria, que tomó el control de la agenda y aprobó un conjunto de leyes en contra del Ejecutivo.
Milei sostuvo que un buen resultado sería lograr “el tercio para defender las medidas del Gobierno”, en relación a que necesita 87 voluntades para blindar cualquier veto a leyes votadas por el Congreso.
Este año solo pudo proteger el veto a la ley jubilatoria pero no pudo evitar que se ratifiquen las leyes sobre emergencia en Discapacidad, financiamiento de universidades y emergencia en el Garrahan, en tanto evitó, hasta ahora, que se rechacen los vetos sobre redistribución de ATN y emergencia en Bahía Blanca.
El peronismo pone en juego 46 de sus 98 bancas, mientras que La Libertad Avanza (LLA) solo 8 escaños de los 37 que integran el bloque, aunque se quedará sin sus principales aliados del PRO y la UCR que ponen en juego más del 60% de sus lugares.
En este contexto, y con un peronismo envalentonado tras el triunfo en la provincia de Buenos Aires, el oficialismo buscará alcanzar entre 70 y 75 legisladores y convertirse en una segunda minoría con poder de fuego.
Con ese número espera luego negociar con los dos bloques que representarán a los gobernadores, que son Provincias Unidas, que espera alcanzar una bancada de 20 miembros, e Innovación Federal, que hoy tiene 8 miembros y aspira alcanzar una decena.
Una de las ventajas que tiene el oficialismo es que pone solo 8 de las 37 bancas en juego, con lo cual arrancará ya con una base de 31 bancas, aunque con el inconveniente de que su principal aliado, el PRO, arriesga 21 de sus 35 bancas y la UCR, 11 de sus 14 escaños.
LLA tiene una base de 29 diputados con mandato hasta 2027 y espera obtener 45 escaños, al calcular que podrían obtener 14 bancas en Buenos Aires, 4 en el distrito porteño -sin contar las dos del macrismo-, 4 en Córdoba, dos en Mendoza, tres en Santa Fe y una en Entre Ríos.
También confían en obtener una banca en cada una de las 18 provincias restantes, con lo que sumarían 46 bancas, y si añadieran cinco más se acercarán a los 80 diputados, con lo que será mas fácil tener el número mágico para blindar los vetos.