Una buena postura corporal es fundamental para mejorar la salud y la calidad de vida. Mantener el cuerpo alineado correctamente puede prevenir dolores, aumentar la energía y mejorar funciones vitales como la respiración y la digestión. Una postura adecuada, aumentará el bienestar general a largo plazo.
Una postura correcta distribuye el peso del cuerpo de manera uniforme, lo que reduce la tensión en los músculos, articulaciones y ligamentos. Esto se traduce en menos dolor de espalda, cuello y hombros, mayor flexibilidad y una menor probabilidad de sufrir lesiones. Una postura erguida permite respirar más profundamente, ya que los pulmones pueden expandirse por completo. Además, puede influir en la confianza y estado de ánimo, una buena postura nos hace sentir y ver más seguros.
Mejorar la postura es un hábito que se construye con pequeños cambios. Algunos tips para que tengas en cuenta: al estar de pie procura mantener los hombros relajados y ligeramente hacia atrás, con el abdomen un poco contraído. Es importante distribuir el peso de tu cuerpo equitativamente en ambos pies y evitar bloquear las rodillas; al estar sentado tu espalda tiene que estar recta y bien apoyada contra el respaldo de la silla. Tus pies deben estar planos en el suelo y tus rodillas a la altura de tus caderas (o un poco más abajo). Evita cruzar las piernas durante mucho tiempo, realizá pausas frecuentes para levantarte y hacer ejercicios de estiramiento; al dormir, lo ideal es hacerlo de lado con una almohada entre las piernas para alinear la columna, o boca arriba con una almohada pequeña debajo de las rodillas. Procura evitar dormir boca abajo, ya que fuerza la posición de tu cuello; al trabajar o estudiar, si estás mucho tiempo sentado, asegúrate de que la silla y escritorio sean ergonómicos. La pantalla de la computadora debe estar a la altura de los ojos; tomá conciencia de tu cuerpo, a lo largo del día revisa tu postura. Un simple ajuste puede hacer una gran diferencia; fortalece tu core, los músculos abdominales y de la espalda baja son esenciales para soportar tu columna vertebral. Incorpora ejercicios como planchas y puentes en tu rutina.
La actividad física regular es un complemento fundamental para lograr una buena postura corporal. Al fortalecer los músculos, mejorar la flexibilidad, aumentar la conciencia corporal y ayudar a controlar el peso, el ejercicio te otorga las herramientas necesarias para mantener una postura óptima, reducir el dolor y disfrutar de una vida más activa y saludable.
Claudio V. Penna
Prof. Nac. de Educ. Física. @lospenna