Fernando Espiniella nació el 31 de octubre de 1938 en la Capital Federal. Es médico y militar. Durante la guerra de Malvinas tenía 43 años y era mayor de la Fuerza Aérea Argentina destinado en ese momento en el Hospital Aeronáutico. También se desempeñó como jefe de sanidad de la Fuerza Aérea en las Islas Malvinas. Es médico egresado de la Universidad de Buenos Aires (UBA) con especialidad en gastroenterología y endoscopía digestiva. Además es miembro titular de la Asociación Médica Argentina (AMA), fue director del Hospital Aeronáutico Central y dirigió el Instituto Nacional de Medicina Aeronáutica y Espacial. Es hincha de San Lorenzo y amante del tango. Escribió dos libros "Tras el manto de neblina" y "El tango y la aviación argentina". Actualmente es Comodoro y uno de los principales conferencista de la FAA sobre la cuestión de Sanidad en Malvinas. Preside la Peña Carlos Di Sarli y la Liga "El Conejo Alado".
- ¿A 40 años de la guerra de Malvinas cuáles son las impresiones que nos puede brindar?
- Mi primer recuerdo es cuando tomaron Malvinas y me puse contento con mucha emoción y alegría, pero al mismo tiempo me asaltaron las dudas de que iba a haber una guerra. La historia dice que Inglaterra es un pueblo agresivo, guerrero, sanguinario, conquistador, invasor, expansionista y colonialista. Además Inglaterra cuando tomó Malvinas en el año 1833 había derrotado a la flota francoespañola en la batalla de Trafalgar de modo que quedó como Reina de los Mares. De ahí que quiso conquistar el mundo, recordemos que quiso conquistar América en su totalidad. En América del Sur la única entrada que había era a través del Río de la Plata cuando hicieron las invasiones inglesas que fueron rechazadas. Inglaterra conquistó parte del Africa, Oceanía, parte de Medio Oriente, la India y quiso conquistar China pero fue rechazada. De tal modo que nosotros habíamos tocado su orgullo. Nadie sabía cómo era Malvinas, cuando llegamos nadie nos explicó cómo eran las Islas, de modo que tuve que hacer una planificación adecuada al medio. Malvinas era desértica, había viento, piedras, tierra y musgos. Por la velocidad del viento los árboles se quiebran y no crecen. Era una desolación total. Había sólo un hospital para todas las Islas.
- ¿Se podría decir que los ingleses tenían descuidada a la población isleña?
- Totalmente. Un ejemplo es que la población malvinense en ese tiempo era de 1.800 habitantes, 850 vivían en Puerto Argentino o Port Stanley, la otra población más cercana era Darwin a 100 kilómetros donde vivían 120 habitantes. Los demás estaban distribuidos en estancias o villorrios de muy poca gente. No había caminos, el único camino asfaltado era desde el Aeropuerto por toda la zona costera que llegaba hasta el Cuartel de los Marines. Para viajar de un lado al otro lo ideal era el avión. Generalmente estaba lluvioso y con mucho viento, por lo cual el vuelo dependía de los factores climáticos y en muchos casos la atención médica era tardía. La atención médica de los isleños era muy escasa. Creo que los ingleses a los malvinenses no los trataban como ciudadanos de segunda sino como ciudadanos de cuarta o de quinta categoría. Ellos tenían solamente colegios primarios. Para ir a colegios secundarios tenían que ir a las islas del Commonwealth, no podían ir a estudiar a Londres.
- ¿Cómo terminaron los isleños luego de la Guerra?
- Ellos ganaron pues terminaron como súbditos de la Corona Británica y como ciudadanos de primera clase. Ellos pudieron ir a estudiar o a vivir a las islas británicas. Ganaron mucho con la guerra. A nosotros los isleños no nos querían ni nunca nos quisieron y ahora sigue igual el sentimiento. No nos quieren bajo ningún punto de vista. Por consiguiente las conversaciones argentinas deben ser con las autoridades británicas y no con los isleños, pero se debe respetar sus derechos a la propiedad y a su cultura pero bajo leyes argentinas.
- ¿Piensa que se puede recuperar Malvinas?
- Creo que no porque ya Inglaterra estableció una base militar de gran poderío con aviones, barcos y misiles. No lo creo, además las Naciones Unidas y la OTAN están del lado de ellos. Hoy las Malvinas tienen el mayor índice per cápita del mundo. No obstante hay que seguir tratando con Gran Bretaña no con los isleños.
- ¿Algún gobierno argentino en las últimas cuatro décadas hizo algo por Malvinas?
- En las últimas 4 décadas no hubo ninguno. El único gobierno que se preocupó fue el del Presidente Arturo Illia que se consiguió que la ONU que saque la resolución 2065 la cual permitió que la causa ingrese al Comité de Descolonización de la ONU. Por más que Argentina proteste, Inglaterra nunca va a las conversaciones.
EL BAUTISMO DE FUEGO
- ¿Qué recuerda de aquel 1º de mayo, el bautismo de fuego de la Fuerza Aérea?
- En la madrugada, pasadas las 4 am un bombardero Vulcan británico atacó el aeropuerto de Puerto Argentino lanzando 21 bombas de 1.000 libras (unos 500 kg. c/u) provocando grandes destrozos y entre ellos la destrucción de la mitad de la pista aérea en forma vertical. Luego aproximadamente a las 8.30 los Sea-Harrier atacaron en vuelo bajo, la base provocando víctimas (murieron dos soldados de la FAA) y grandes daños.
- ¿De qué manera actuó la artillería antiaérea?
- Derribó dos de esos aviones y a partir de ese momento los Sea Harrier volaban a gran altura para evitar ser alcanzados por el fuego argentino y lanzaban sus bombas a gran altura sin precisión y además tomaban fotografías del aeropuerto y su pista. Nuestro personal de Construcciones armó una escenografía simulando la rotura total de la pista y cuando los Hércules argentinos superaban el bloqueo aeronaval británico limpiaban la escena para permitir el aterrizaje y despegue de los C-130. Luego se volvía a armar la simulación de la pista destruída por los ingleses que sacaban fotografías aéreas y daban por sentado la destrucción de la misma. Cuando se enteraron al final de la guerra que la misma estuvo operable sintieron una gran frustración y desilusión.
- ¿Qué otros episodios tiene en su memoria de aquella histórica fecha?
- Alrededor de mediodía, tres fragatas británicas comenzaron a atacar las posiciones del aeropuerto y otros objetivos alrededor de Puerto Argentino con su artillería, sin respuesta de nuestras baterías costeras pues los barcos se hallaban fuera de su alcance. Esto provocó gran desilusión entre los efectivos argentinos pues pensábamos que tras este ataque con tanta impunidad, el desembarco enemigo sería rápido y pondrían fin a la guerra en muy poco tiempo. Creo que entramos en un estado de frustración y depresión. Pero pasadas las 14 aparecieron los aviones argentinos que atacaron a las fragatas poniéndolas en fuga, una de ellas humeante. Tal acción de la Fuerza Aérea Argentina con sus aviones y sus bravos pilotos cambió la depresión en forma instantánea por gritos de júbilo y euforia que duraron toda la campaña. "¡Viva la Patria!", "¡Viva la Fuerza Aérea!" atronó en Puerto Argentino.
- ¿Cómo evalúa la actuación de los efectivos argentinos en el aire?
- Se desempeñaron con gran patriotismo cumpliendo con el sagrado juramento de ¡Defender a la Patria hasta perder la la vida!. La superioridad en hombres y la mayor tecnología inclinaron la balanza hacia los invasores. Los 649 Héroes caídos dieron lo mejor de sí ¡Su Vida!. Los primeros en reconocer el arrojo y valentía y su heroísmo, especialmente de la Fuerza Aérea Argentina, fueron justamente nuestros adversarios. Nuestro pueblo, lamentablemente, fue haciendo un reconocimiento tímido, lento y tardío. 649 banderas argentinas flamean en la tierra y mar de Malvinas como símbolo de sacrificio y heroísmo de los caídos que dieron su vida por una causa justa: Las Islas Malvinas pertenecen a la Nación Argentina.
El grupo que llegó a Malvinas el 11 de abril de 1982. El primer de la izquierda es Espiniella.