PBI: caída récord en segundo trimestre
La debacle de la economía en ese período mostró un derrumbe histórico 19,1% interanual.
La actividad económica tuvo un derrumbe récord del 19,1% en el segundo trimestre del año como consecuencia del impacto de la emergencia sanitaria, y superó así la baja sufrida tras la salida abrupta de la convertibilidad por la crisis de 2001
La contracción de la actividad económica es la más alta desde que el Indec confecciona el indicador, superando el registro del 16,3% del primer trimestre de 2002.
La producción de bienes y servicios cayó, además, 16,2% con relación al primer trimestre del año.
En el primer semestre del año cae 12,6% con relación a igual período del 2019.
Según el informe de Avance del Nivel de Actividad, la inversión sufrió un desplome del 38,4% respecto del segundo trimestre del 2019, por las caídas interanuales del 47,6% de la inversión en construcciones, 62% de otras construcciones, 27,9% en maquinaria y equipo, y 25,1% en equipo de transporte.
Dentro de maquinaria y equipo, el componente nacional descendió 21,6% y el importado, 31,6%, mientras que en equipo de transporte el componente nacional se retrotrajo 18,2% y el importado, 38,5%.
La oferta global, comparada con igual período del año anterior, cayó 21,1%, por la baja en el Producto Bruto y la contracción del 30,1% en importaciones de bienes y servicios reales.
En la demanda global se observó una disminución de 38,4% en la formación bruta de capital fijo o inversiones, del 22,3% en el consumo privado y del 10,1% en consumo público, mientras que las exportaciones registraron un descenso de 11,7%.
El 19,1% de caída del producto dejo un PIB valorizado en $606.993 millones al finalizar el segundo trimestre del año.
El sector de la actividad de hoteles y restaurantes registró la caída más pronunciada del 73,4%, seguido de servicios comunitarios, sociales y personales, del 67,7% y la industria de la construcción, que se contrajo 52,1%.
También registraron altos niveles de desaceleración de la actividad del servicio doméstico en el sector privado de una baja del 38%, el de la salud con 23,5%, transporte, almacenamiento y comunicaciones, con 22,5%, la industria manufacturera, que se contrajo 20,8%, y la producción de minas y canteras que disminuyó un 18,3%.
Por debajo del nivel general se ubicaron las caídas de consumo en el comercio mayorista y minorista con 16,9%, la actividad pesquera con 14% y servicios inmobiliarios y de alquiler, con 14,3%.