El valor de una gran actriz

Sobresale Hilary Swank en "Lo que fuimos"

 

 

"Lo que fuimos" ("What They Had", Estados Unidos, 2019). Dirección: Elizabeth Chomko. Guion: Elizabeth Chomko. Actores: Hilary Swank, Michael Shannon, Blythe Danner, Robert Forster, Taissa Farmiga, Josh Lucas. Duración: 101 minutos. Clasificación: sólo apta para mayores de 13 años.


Pocos temas son más tristes que el Alzheimer en el cine. Incluso más que el cáncer. Porque la pérdida de la memoria se lleva consigo recuerdos, nombres, porqués y para qué. Y esa persona que en algún un momento fue tan fuerte como el roble queda a la deriva. Y las decisiones de qué hacer, por lo general, parten de los hijos, sobre un cuerpo sano y un alma en blanco.

Panorama duro, y más si la que debe lidiar con esta ironía del destino es Hilary Swank, una de las mejores actrices del momento, que logra que el sentimiento entre por todos nuestros sentidos, hasta golpear nuestra fibra más frágil.

Escrita y dirigida por Elizabeth Chomko, "Lo que fuimos" muestra la encrucijada en la que se ve inmersa Bridget (Swank), una chef de California, cuando su hermano le pide que regrese a la casa de sus padres en Chicago, cuando entienden que la enfermedad de su madre (Blythe Danner) ya no tiene retorno. Por un lado está su padre Bert (Robert Forster), un hombre católico, conservador y heroico, quien se niega a que su mujer sea internada en un centro asistencial; y por el otro, su hermano Nicky (Michael Shannon), que vive en la misma ciudad que ellos y considera que otro episodio de su madre puede resultar letal para ella.

HISTORIAS PARALELAS
Lo que a priori podría resultar una catarata incesante de pesares, no lo es. El acierto de Chomko es incluir y darle fuerza a historias paralelas como para suavizar un poco. Entonces vemos la tirantés adolescente de Emma (Taissa Farmiga), la rebelde hija de Bridget; la periferia de Nicky, quien se gana la vida haciendo los mejores Manhattan en su bar de Chicago, y a un ingenuo y enamorado constructor que mete sus narices en la angustia existencial de la misma Bridget. Y todo resulta armonioso porque la grandiosa figura de Swank potencia la pantalla.

Cada una de sus escenas es el vivo retrato de la tristeza, de la duda, de la alegría o la esperanza. Si "Lo que fuimos" es una película que queda en el recuerdo, incluso con un tema tan recurrente como el Alzheimer, se lo debe todo a ella. Imposible no creerle cada uno de sus gestos.

El final es indefectible, aunque no lo querramos. Lógico, aunque haya un plus. Imaginado, cuando descubrimos al principio por qué esa mujer mayor se va de su casa solamente con un tapado en medio de una tormenta de nieve en plena madrugada. Y cuando todo nos lleva a un mar de lágrimas, Swank en complicidad con su directora, nos roba la última sonrisa.

Calificación: Muy buena