El acto del 20 de Junio agudizó aún más el papelón del año pasado

Claves de la política

El 8 de junio a través de la columna "Claves de la seguridad" La Prensa advirtió a sus lectores, en relación al acto por el Día de la Bandera, que:

"Será sano para la República que el Presidente Macri, en el último año de su mandato -un año electoral por definición-, anteponga su deber protocolar a la especulación política y afirme en Rosario la autoridad constituida. Pues debe considerarse inadmisible que no se pueda garantizar la seguridad del Presidente para la realización de un acto tradicional de contenido patriótico. Todo un año han tenido la AFI, el Ministerio de Seguridad de la Nación y la Provincia de Santa Fe, para que aquel bochorno no se repita y haciendo su trabajo -nada más que eso-, lograr que la institucionalidad prime por encima del distinto color político y el contexto electoral. O sea, lo que se lleva con la idea de la normalidad".

Lamentablemente los hechos del 20 de Junio de 2019, lejos de remontar el papelón del año anterior, lo han agudizado: el acto oficial en el Monumento a la Bandera de Rosario fue una ceremonia reducida a la mínima formalidad. Frente a la ausencia del Presidente de la Nación, la muda y fantasmal asistencia del gobernador Miguel Lifschitz y la intendente Mónica Fein evidenciaba el vacío litúrgico del acto. Tanto así que, ante la falta de convocatoria pública, el único calor patrio que allí se agitó fue el comprensible enojo de los veteranos de guerra de Malvinas. Comprensible, porque quien defendió a la Generala Albiceleste en el campo de batalla no puede más que ofenderse ante la apatía de la dirigencia política.

El carácter nacional de las celebraciones patrias hace ineludible la responsabilidad presidencial de velar por su vigencia. Algo que no entendió el Presidente Macri al dejar caer el carácter tradicional y patriótico del acto, escapando de él en lugar de afirmar con su presencia la institucionalidad y autoridad de su investidura.

Sin asumir el fracaso de no asistir al acto oficial, los cráneos del macrismo decidieron embarrarla todavía más organizando para el Presidente un acto cerrado en el club Ciclón de Rosario y rodearlo con chicos de escuelas primarias.

A nadie se le puede escapar lo que esa maniobra tiene de escudo antiprotestas. Algo ratificado por la presencia flanqueando al Presidente de la ministro de Seguridad Patricia Bullrich, cosa que pudieron al menos disimular si en lugar de ella lo secundaba el ministro de Educación Alejandro Finocchiaro.
Luego, la presencia de alumnos primarios debía marcar el contenido del discurso presidencial y mantenerlo enfocado en celebrar el significado de la Bandera. Correspondía, conforme a la elección del auditorio, un discurso escolar; de Billiken si se quiere.

Pero en lugar de dirigirse a los chicos, el mismo Presidente Macri que no se atrevió a poner el cuerpo en el Monumento a la Bandera, decidió (y en esto no puede haber asesoría alguna que lo exculpe) hacer lo mismo que se critica al kirchnerismo: dar un discurso de facción exaltando su Presidencia, con slogan incluido de "estamos haciendo lo que hay que hacer".

En ese contexto fue totalmente desubicada la alusión a los Moyano, porque todos los días dispone el Presidente de mejores ámbitos para decir tales cosas.

Suena patética cualquier bravata en boca de un Presidente que, demostrando que su seguridad sigue sin poder garantizarse en las calles, se dirige a las mafias desde la contención de un ambiente cerrado y rodeado de chicos.

Y allí detrás del Presidente la sonrisa de Patricia Bullrich, con su tapado vintage, era menos engimática que La Gioconda. Ella cree que está haciendo las cosas bien, sin autocrítica desde que no acepta analizar sus errores...

El kirchnerismo buscaba afanosamente (el afano está en su naturaleza) hacer de los actos patrióticos actos partidarios desde el uso faccioso de los recursos del Estado, el macrismo por cobardía directamente los evita y finalmente cae en lo mismo.

No quiero ineptos, ni chorros ni cobardes. ¿Es mucho pedir? Pareciera que sí.


* El lector podrá encontrar más artículos del señor Corbat en sus dos blogs: plumaderecha.blogspot.com y unliberalquenohabladeeconomia.blogspot.