"El acoso lo sufrimos todas"

Mientras se pone en la piel de Gina en la nueva puesta de José María Muscari, la intérprete destaca el trabajo que está haciendo el Colectivo de Actrices Argentinas desde su nacimiento en abril del año pasado.

 

Sobre el escenario del Multiteatro, Cecilia Dopazo es Gina, una mujer explosiva y sin filtro capaz de pasar del enojo a la risa sin escala. "Hay cierta locura que comparto con ella", dice la ex "Tango Feroz" del otro lado del teléfono sobre el parecido con su personaje en "Gente feliz", la obra que José María Muscari estrenó hace algunos días. "Puedo estar re enojada y al toque se me pasa o me hacen un chiste y me río. Creo que es muy de actriz en el sentido de que reaccionás tal cual sentís, porque es lo que te entrenaste para hacer. Eso en la vida llama la atención y el lugar para hacerlo en este momento es a través de Gina, por ejemplo".

Pero no es el único lugar a través del cual Cecilia llama la atención por estos días. Desde abril del año pasado alza su voz en el Colectivo de Actrices Argentinas, el grupo que surgió para hacer visible la Campaña Nacional por el Derecho al aborto legal, seguro y gratuito. "El Colectivo es lo mejor que nos pudo haber pasado".

COMPROMISO

-¿Cómo vive todo lo que ha pasado con el Colectivo de Actrices Argentinas?
-Me parece buenísimo. El Colectivo acaba de cumplir un año y fue poderosísimo lo que pasó realmente. La convocatoria fue de Dolores Fonzi y enseguida nos juntamos. El tema del aborto nos convocó a todas, nos atravesó y salimos sin dudarlo a apoyar el aborto seguro, legal y gratuito. Hicimos mucho ruido y logramos visibilizar nuestra ideología y fue una gran confirmación del poder que tenemos cuando nos juntamos las mujeres. Nuestra profesión tiene eso, que al ser conocidas se puede visibilizar más y concientizar sobre este derecho que tenemos todas.

-También jugó un papel importante en el tema de las denuncias por acoso sexual.
-En buena hora.

-¿Le pasó en algún momento de sufrir acoso?
-Acoso puntual no, no que recuerde. Pero sí por el simple hecho de ser mujer desde muy chiquita sí por supuesto que lo hemos sufrido todas. Siempre pongo el ejemplo de caminar por la vereda a partir de los 12 años y que te miren de un modo impune los encargados de edificio, por ejemplo. Están parados ahí, con la escoba en la mano, aburridísimos y lo único que hacen es mirar gente entonces vos venías de frente y te miraban las tetas y después pasabas y te miraban el culo con una impunidad absoluta. Tanto es así que yo irrumpía esa escena y les preguntaba la hora o dónde quedaba una calle, para que entendieran que había una persona y les diera un poquito de vergüenza. Esa era como mi pequeña lucha privada frente a esa injusticia.

-¿Laboralmente no le pasó?
-Sí, me pasó pero no de un acoso total. Esto mismo que te cuento con los encargados de edificio pasaba con los microfonistas, que son las personas más babosas que hay. No voy a decir que todos pero una gran mayoría sí. Es un micrófono, que aunque salga 600 millones de dólares, una no es idiota y se lo puede poner. Y los microfonistas hacen de cuenta que es una joya y sólo ellos te pueden meter el micrófono en el escote y después calzártelo a la altura del cinturón. Igual es algo que quedó un poco vetusto. Estoy hablando de otras épocas, con gente con otra cabeza. Pero yo ahí también sacaba mi rebeldía y les decía: "Dame, que yo puedo" o sino la otra era "sos microfonista, no mi ginecólogo", adelante de todo el mundo. Yo aliento mucho a las chicas a hablar y a traspasar ese vidrio y exponerlo y visibilizarlo, que es lo que estamos haciendo todas. El Colectivo es lo más. Es lo mejor que nos pudo haber pasado. Hay mucho que festejar.

COMEDIA

-En "Gente feliz" vuelve a trabajar con José María Muscari.
-Es la tercera vez que trabajo con José. Evidentemente las experiencias han sido positivas y ha sido recíproca la sensación porque me volvió a convocar para esta y la verdad es que estoy muy contenta. El es una usina de trabajo, no para de trabajar nunca, siempre está produciendo proyectos, generando trabajo, para él mismo, para actores, productores. No se amedrenta ante la situación difícil que se está viviendo en el país y el teatro no es una excepción. Sin embargo encuentra la forma de armar un proyecto en este momento. Y eso es muy valioso.

-¿Cómo define a Gina, su personaje?
-Ella ama a todo el mundo, a su abuela, a su madre, a su hija y a su pareja, que es unos años más joven. Esto es algo que la hace sentir muy bien porque siente que se levantó a un pendejo y en la edad en la que está le resulta muy importante eso. Pero a la vez tiene una características que es muy negadora, porque si bien hoy siente que pudo estar con un hombre más joven y lo pudo seducir a la vez está teniendo sospechas de que ese hombre le está siendo infiel y la manera que tiene de lidiar con eso es siendo muy negadora.

-¿Qué cree que le está aportando Gina a usted?
-Más allá de Gina, la obra me está aportando la posibilidad de seguir explorando mi propia comicidad, que es lo que más me gusta.

-¿Se siente cómoda en ese espacio?
-Transitando el humor y la comicidad es donde más cómoda me siento. Así que estoy muy contenta de tener una nueva oportunidad para seguir ahondando en este camino.

-Hace mucho que no hace televisión con continuidad, ¿tiene ganas de hacer algo?
-La tele está casi muerta. Recién venía escuchando a (Sebastián) Wainraich en el auto que hablaba en su programa justamente de eso, de como la tele ha quedado vetusta frente a tantas posibilidades audiovisuales. Y la verdad es que es eso lo que ha pasado, por un lado la enorme oferta de plataformas y dentro de esas plataformas la cantidad de cosas que hay para ver. Es muy difícil que la televisión ocupe un lugar demasiado relevante y por otro lado se junta con una situación económica muy jorobada donde los productores tampoco tienen los recursos para generar ficción. Yo hice el año pasado "El mundo de Mateo", de Mariano Hueter que se va a estrenar en poco tiempo en la Televisión Pública.

-¿Le dan ganas de volver a dirigir una obra?
-Sí, estoy escribiendo con otro autor una comedia para protagonizar yo, que si todo sale bien la haré después de "Gente feliz".