Fracasó en el Senado intento “K” de limitar el endeudamiento

No pudo obtener dictamen favorable un proyecto que ponía en riesgo las negociaciones con el FMI. El kirchnerismo trató de fijar por ley la ratio deuda/PBI en el 60%, lo que impediría ampliar el crédito con el Fondo para sortear la crisis cambiaria.

La minoría kirchnerista del Senado aliada con el peronista Adolfo Rodríguez Saá fracasó en su intento de dictaminar un proyecto que hubiera impedido a Mauricio Macri tomar deuda para sortear la crisis cambiaria en curso.

La iniciativa reforma la Ley de Administración Financiera, estableciendo que el stock de deuda tomada por el Estado no podrá superar el 60% del PBI. Fue presentada por Rodríguez Saá y acompañada por la kirchnerista María Inés Pilatti.

La semana pasada se difundió una carta con similar propósito del ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno, dirigida a la directora del FMI, Christine Lagarde, solicitando en nombre del peronismo que no autorizase más créditos al gobierno argentino.

De haber obtenido dictamen favorable el proyecto de Rodríguez Saá, hubiera reducido drásticamente el margen de maniobra del Poder Ejecutivo en plena negociación con el FMI.

Como la señal para los mercados hubiera sido negativa, el intento opositor fue rápidamente neutralizado por los senadores del oficialismo y del peronismo “racional” que concurrieron a la Comisión de Presupuesto y Hacienda lo que puso en evidencia que los “K” se encontraban en minoría.

Pasado a la firma, el proyecto de Rodríguez Saá-Pilatti no consiguió ni una sola. Paradójicamente estuvieron ausentes Rodríguez Saá y los dos únicos miembros de la comisión de Presupuesto y Hacienda pertenecientes al kirchnerismo: Marcelo Fuentes y Cristina Fernández de Kirchner.

Estas ausencias fueron compensadas por las senadoras “K” Anabel Fernández Sagasti y María de los Angeles Sacnun que fustigaron al gobierno y reclamaron que el manejo de la deuda sea controlado por el Congreso antes de que se emitan bonos u obligaciones y no con posterioridad como ocurre de acuerdo con la normativa vigente.

Sacnun señaló que en el presupuesto 2019 la deuda está calculada en un 87% del PBI, lo que impediría la toma de cualquier préstamo. También destacó que el Ejecutivo quiere modificar las condiciones de reestructuración de la deuda ante la posibilidad de un nuevo “canje”.

El peronista José Mayans, en tanto, planteó un panorama crítico de la deuda y calificó al presupuesto 2019 de “irresponsable”. Reclamó que el actual gobierno no deje al próximo en 2020 una situación financiera inmanejable.