La realidad obstaculiza la campaña electoral 2019

Lo que vendrá- En estos quince días que vienen, en Cambiemos serán pocos los que puedan gozar de unas "felices vacaciones", deben rearmarse las estrategias y sobre todo juntar la mayor cantidad de información posible sobre los movimientos del peronismo con y sin Cristina Fernández.

Las vacaciones de invierno que hoy comienzan no trajeron respiro al Gobierno que debería aprovechar este remanso informativo para apurar los cambios en su estrategia electoral de cara al 2019.

Tal como anticipamos en este espacio, Mauricio Macri ordenó postergar el inicio de la campaña hasta que la crisis económica se calmara y el equipo que encabeza Marcos Peña, pudiera ocuparse plenamente de esa tarea. 

En estos quince días que vienen, en Cambiemos serán pocos los que puedan gozar de unas "felices vacaciones", deben rearmarse las estrategias y sobre todo juntar la mayor cantidad de información posible sobre los movimientos del peronismo con y sin Cristina Fernández. Las carpetas con las últimas encuestas ya están sobre la mesa chica y ahora deben evaluarse sus resultados, que, si bien son sobre una porción pequeña de población, marcan tendencias a tener en cuenta. Algunas llevan tranquilidad porque tanto Horacio Rodríguez Larreta como María Eugenia Vidal siguen teniendo una fuerte imagen positiva en sus respectivos territorios. Otro tema son los números del Presidente que ve como su imagen negativa del 59% supera a la positiva que ya cayó al 36%.

Otro tema a considerar es el supuesto silencio de la ex presidente que inquieta a Macri, en el Gobierno prefieren que la señora se mantenga activa, aunque sea en las redes sociales porque esto mantiene al peronismo distraído. Si bien la imagen negativa de la viuda de Kirchner alcanza el 50% su piso del 36% no deja de ser un número inquietante para Cambiemos que sabe que no se puede definir con claridad una estrategia electoral sin tener en cuenta el factor Cristina.

En los días que viene desde el Ejecutivo deberán analizar muy bien los pasos a seguir porque el panorama no es de lo más alentador. El acuerdo con los gobernadores peronistas por el presupuesto 2019 está cada vez más lejos; la ofensiva opositora al acuerdo con el FMI se hará notar con más fuerza y habrá reclamos desde el kirchnerismo y los partidos de izquierda para que no se respete lo firmado.

Macri está obligado a dar golpes de efectos para no seguir cayendo, dese su entorno le habrían sugerido que saque por Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) la ley de Extinción de Dominio. Los votantes del PRO hacen hasta campañas en las redes sociales para juntar firmas con la esperanza de obligar a tratar la ley ya aprobada por Diputados en el Senado.

El anuncio que iba a realizarse al terminar el Mundial de Rusia, la reelección de Macri en Nación, Vidal en Provincia y Larreta en Ciudad, deberá esperar al menos hasta los primeros días de agosto. Un encuentro en el que el Gobierno puso muchas expectativas es el que podrían tener la directora del FMI, Christine Lagarde y algunos referentes de la oposición, en su próxima visita a Buenos Aires por la reunión de Ministros de Finanzas y presidentes de Bancos Centrales del G20 el viernes próximo.
¿Podrá Macri manejar los dos frentes a la vez, la solución para poder tener aprobado el Presupuesto y el lanzamiento de la campaña de Cambiemos? Si no soluciona lo primero, el tema de la reelección se le puede volver en contra. Tal ves sea conveniente ir paso a paso para no tener que volver a decir "nos equivocamos".

CRISTINA TIENE ESTRATEGIA
En el entorno de la ex presidente se habla del lanzamiento de la campaña y de llevar Unidad Ciudadana a todo el país. De la mano de La Cámpora se están organizando giras al interior para buscar candidatos locales que tengan peso en sus comunidades. Por ahora Cristina pretende afirmar su partido y luego intentar formar una coalición con la que poder enfrentar a Cambiemos en 2019 y para ello ha buscado fondos que le estaría aportando el empresario Eduardo Eurnekián a través del ex gobernador Felipe Solá, que se propone como candidato a presidente de esa posible coalición.

Pese a que CFK no habla de ser ella misma candidata y mantiene como siempre la intriga, en su entorno se ilusionan con postularse a sabiendas que a último momento los pueden bajar a empujones, como ha hecho siempre la senadora. Todos hablan de un peronismo unido pero esta opción está cada vez más lejos, Sergio Massa ya busca su camino para ser el líder del Peronismo Federal y desde ese bloque la resistencia a cristinizarse no cede.

Si el justicialismo dirime sus candidatos en unas PASO la pelea puede ser dura y todos saben que perder allí es el final. De cualquier manera, estos entramados y zonas oscuras no hacen más que alentar en la cabeza de muchos gobernadores peronistas la idea de adelantar las elecciones en sus provincias para despegarse de la pelea por las nacionales. Se vienen tiempos políticos calientes y la presión por buscar acuerdos puede derivar en pactos de papel que se rompan al primer desacuerdo.

Felipe Solá era un hombre de Massa y hoy trabaja para Cristina, Eduardo Duhalde sigue operando desde las sombras, la CGT no termina de aclarar su situación y mientras tanto el tiempo se agota en medio de indefiniciones. Cambiemos no lo tiene tan fácil, la mala situación económica opera en su contra y puede ser un obstáculo muy difícil de vencer en medio de una campaña electoral.