"Hay un antes y un después de las cumbres"

Cuando el ex presidente de los Estados Unidos George Bush (h) incluyó a Corea del Norte dentro del "Eje del mal", el mundo casi se desayunaba con una noticia que ponía en pie de guerra a ambos países.

Luego, su sucesor Barack Obama, mucho más pacífico, intentó con sanciones y presiones desmantelar los proyectos nucleares de Pyongyang que amenazaban no sólo a su vecino del sur sino también a Japón, cuyo territorio fue sobrevolado varias veces por los misiles norcoreanos.

La llegada a la Casa Blanca de Donald Trump, incluso, no era más auspiciosa: sin experiencia en política y con un discurso imprevisible, hacía presagiar un enfrentamiento bélico cada vez que le contestaba por Twitter o TV al líder Kim Jong-un, que tampoco se quedaba callado.

Sin embargo, lo impensado ocurrió. El magnate estadounidense abrió la puerta del diálogo para la península coreana y tras las cumbres de Panmunjon y Singapur se firmaron sendas declaraciones que llevan tranquilidad a todo el planeta y permiten que los pueblos que fueran separados por el conflicto en 1953 tengan más esperanzas de volver a encontrarse. 

Este complejo y nuevo escenario lo aclara para La Prensa el embajador surcoreano en la Argentina, Lim Ki-mo, quien sostiene que ahora hay un "firme deseo" para el desarrollo sostenible de las relaciones intercoreanas y el establecimiento de una paz permanente en la región. 

-¿Cuál es la valoración del gobierno surcoreano respecto a la cumbre entre Donald Trump y Kim Jong-un?
-Considero que la cumbre entre Estados Unidos y Corea del Norte tuvo una gran relevancia en cuatro aspectos. En primer lugar, ha sido la primera entre ambos países, lo cual ha mostrado que están en una nueva fase de relación, mientras que el líder norcoreano Kim Jong-un ha reafirmado su compromiso público con la desnuclearización completa de la península coreana. En segundo lugar, se ha creado un sistema en donde la relación intercoreana se irá desarrollando al mismo tiempo que la relación Estados Unidos-Corea del Norte. Para que el conflicto en la península se resuelva, estas dos relaciones deben ir juntas, como si fueran dos ruedas del mismo coche. Por eso puedo decir que la cumbre entre Estados Unidos y Corea del Norte ha permitido que también haya un desarrollo sinergético en las relaciones intercoreanas. En tercer lugar, esta cita ha reforzado el momento histórico de diálogo a través de la comunicación y la negociación, cimentando la confianza personal entre los dos líderes. Y en cuarto lugar, la reunión entre los presidentes Trump y Kim Jong-un ha incluido a Corea del Norte como un miembro responsable en la comunidad internacional. Después de Singapur se puede observar que hay un antes y un después en la posición de Corea del Norte dentro de la comunidad internacional, porque ahora tiene mejores condiciones para tomar decisiones estratégicas y de manera firme, tales como la desnuclearización o la apertura de su país. 

-En Singapur no se incluyó el ítem "CVID" (desmantelamiento completo, verificable e irreversible, en inglés) que quería la parte estadounidense. ¿Esto quiere decir que Estados Unidos ha cedido ante Corea del Norte?
-Debemos tener en cuenta que es el primer acuerdo alcanzado sobre la desnuclearización entre Estados Unidos y de Corea del Norte. Y hay que destacar que el líder norcoreano reafirmó ante el presidente Trump su intención de una completa desnuclearización, tal como se acordó en la Declaración de Panmunjom. Corea del Norte está tomando, voluntariamente, una actitud para el desmantelamiento de lugares de experimento nuclear, invitando a la prensa extranjera a presenciarlo. Además, ya ha propuesto medidas concretas como el desmantelamiento de lugares de experimentación de motores misilísticos. Estas acciones distan mucho del pasado, siendo ahora un compromiso real. Me parece que esto sólo es el comienzo.

-Luego de la cumbre hubo opiniones que indicaban que las sanciones sobre Corea del Norte podían ser suavizadas. ¿Cuál es la postura de Corea del Sur al respecto?
-La postura del gobierno de Corea del Sur es la de mantener las sanciones hasta que la desnuclearización norcoreana muestre un avance sustancial. El presidente Trump, en la rueda de prensa celebrada tras la cumbre Estados Unidos-Corea del Norte, también aclaró que las sanciones se mantendrían en la actual situación y que podrían ser suavizadas siempre y cuando se tenga el convencimiento de que la nuclearización de Corea del Norte ya no es una amenaza. 

-¿Se reanudarán las ayudas humanitarias y los proyectos de cooperación económica con los norcoreanos?
-El gobierno de mi país irá viendo los momentos oportunos de cada contribución, teniendo en cuenta la necesidad de ayuda humanitaria a los grupos más precarios y la necesidad de aprovechar el clima creado después de las cumbres. En relación a la cooperación económica entre las dos Coreas, nuestro gobierno está estudiando los intercambios y la cooperación con Corea del Norte, siempre bajo el principio de ejecutar fielmente las sanciones económicas. A través de Unicef y el Programa Mundial de Alimentos, Corea del Sur ha estado estudiando el reinicio de la ayuda humanitaria desde septiembre del año pasado.

¿Cómo afecta la cumbre Estados Unidos-Corea del Norte a las relaciones intercoreanas? ¿Cómo se prevé las relaciones intercoreanas en el futuro?

-La cumbre intercoreana y la de Estados Unidos y Corea del Norte se han celebrado de forma exitosa y consecutiva. Además, se acordaron celebrar posteriores reuniones y negociaciones. Desde mi punto de vista, estas cumbres crearon las condiciones favorables para crear una estructura de mejoramiento de la relación intercoreana y entre Estados Unidos y Corea del Norte. Por supuesto, el éxito de la cumbre entre el presidente Trump y el líder norcoreano Kim dejan una positiva influencia. Quisiera subrayar que el gobierno surcoreano está comprometido a ejecutar fielmente la Declaración de Panmunjom, y así mejorar las relaciones intercoreanas. Nuestro gobierno no sólo se esforzará para que las relaciones intercoreanas y las relaciones entre Estados Unidos y Corea del Norte mejoren cada día, sino también buscará la desnuclearización y el establecimiento de la paz en la península coreana bajo una estrecha comunicación con la comunidad internacional.