El Bafici se puso colorado­

El basquetbolista Rubén Wolkowyski, uno ­ de los primeros argentinos en jugar en la NBA, ­participó de la presentación de un documental­ en homenaje a la Generación Dorada.­

En el marco del Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente que se desarrolla en la Ciudad, el jueves en Plaza Francia se proyectó `Jugando con el alma', un muy buen documental de Christian Rémoli y guionado por Gustavo Dejtiar que retrata la infancia y el progreso de la Generación Dorada de básquet, esos gigantes que con Emanuel Ginóbili a la cabeza marcaron una época en el deporte argentino. ­

Como antesala a la cinta, un aro instalado a metros de la pantalla divertía a niños, jóvenes y adultos con el único fin de pasar un buen momento y ganar pelotas autografiadas. Sin embargo, para sorpresa de propios y extraños apareció a paso tranquilo otro de los integrantes de ese equipo, Rubén Wolkowyski, quien dio una pequeña clínica a los presentes y mantuvo un breve diálogo con La Prensa.  ­

-¿Cómo estás viviendo el Bafici? ¿Qué sentiste cuando te invitaron a este evento?­

-La verdad, que hayan hecho un homenaje a la Generación Dorada con un documental tan lindo nos pone muy contentos, nos hicieron recordar momentos increíbles que vivimos con el equipo. ­

-¿Hay futuro con este cambio generacional de jóvenes que están en la selección argentina?­

-Si te soy sincero, no, pero hay material para trabajar. Lo importante es que la gente que tenga que trabajar con ellos sea la indicada y la capacitada para poder trabajarlos y que puedan llegar, estamos errando en la formación de esos chicos. ­

-¿En qué específicamente?­

-Si tuvimos tantos entrenadores buenos que sacaron jugadores para que vayan a jugar afuera, hay que volver a esas bases, buscar a esos DT que tuvieron la forma y las fórmulas para capacitarnos y que nos enseñaron a jugar. ­

-¿Hay cosas de la NBA que se podrían aplicar en la formación de la Liga Nacional?­

No. La NBA no tiene formación, agarra jugadores formados. Lo que se podría copiar es lo que se hace en sus universidades con los chicos, pero estamos hablando de un mundo muy lejano. Más allá de que tenemos una liga muy buena, los estadounidenses se manejan a otro nivel y por eso son los número uno del mundo.­

-¿Cómo ves la última etapa de Ginóbili y el apodo que le pusieron: `el viejito de 40'?­

-Manu está rindiendo como nunca, está jugando muy bien y se va a extrañar que el mejor jugador de la Argentina no vuelva a la cancha. Pero bueno, espero poder verlo un año más porque es un amigo y lo quiero mucho. ­

-¿Te sorprende este nivel?­

-No, de Manu no me sorprende nada. Es un gran profesional y para eso se preparó, por eso está pasando este gran momento. ­

-¿Vos hubieras llegado a jugar hasta los 40 en la NBA si hubieses querido?­

-Muy difícil en la NBA, pero todo depende del juego de cada uno. Yo me identifico más con el juego europeo, me distinguí más con ese estilo, pero terminé a los 41 en la Argentina porque yo quería, no porque el básquetbol me retiró. No le tengo que pedir nada más a este deporte de lo que me dio.­

El `colorado' se va tal como llegó, apacible y contento entre la gente que le reconoce con cariño su esfuerzo y dedicación por el país. El Bafici también baja el telón, pero deja en esta edición una film emotivo que es, hasta ahora, lo mejor que se vio entre los productos audiovisuales del básquetbol nacional.