Un thriller en la Patagonia

Algo pasó en aquellas vacaciones de las cinco amigas del colegio inglés. Allá en el sur, las adolescentes la pasaron muy bien, pero una de ellas no volvió. Cornelia Villalba se convirtió en un fantasma, un fantasma querido especialmente para Manuela, su mejor amiga. Manuela no pudo superar la pérdida y comenzó a trabajar en la policía.
Ahora mismo, sigue siendo un personaje complejo para sus colegas, protegida del jefe y segura de que el caso Cornelia puede reabrirse ante nuevos indicios. El filme de Alejandro Montiel ("El paraíso de los malditos", "Extraños en la noche") se basa en la exitosa novela "Cornelia", de la periodista Florencia Etcheves. El título es el mismo que la película norteamericana de David Fincher estrenada hace pocos años y que también estuvo inspirada en un libro de éxito de la escritora Gillian Flynn.

PIEZAS NO RESUELTAS
La película es un thriller bastante entretenido, donde algunas piezas no terminan de convencer. Si el diseño audiovisual es estupendo, la fotografía un lujo y los exteriores de San Martín de los Andes y Canarias deslumbrantes, se notan algunas obviedades en el guión y cierta dureza en los diálogos, asunto que en el original, la novela "Cornelia", de Etcheves, no ocurre.
Hay una despareja marcación de actores. Extrañamente, la excelente María Onetto, como la madre de Cornelia, aparece sobreactuada, mientras Rafael Spregelburd, el comisario, muestra altos y bajos y no alcanza la intensidad del personaje de la novela. La Pipa de Luciana Lopilato tampoco está totalmente lograda, aunque tiene buenos momentos, incluso sorprendente despliegue físico, un trabajo de superación visible luego de su última película. Nicolás Furtado ("El marginal") y Julián Serrano se ven correctos en sus papeles.
Destacan Amaia Salamanca (la Alicia de "Gran Hotel"), Pedro Casablanc ("El Egipcio") y Carlos Alcántara, malos de la historia, y la revelación de Oriana Sabatini, una figura con fuerza. También hay una muy buena elección de las adolescentes que protagonizan los flashbacks durante la estadía en el sur, catorce años atrás.
El filme exhibe una construcción formal impecable, pero cierta superficialidad en el tratamiento de caracteres y el desarrollo de situaciones obstaculiza el tono general del relato. A pesar de todo, el argumento atrae y el ritmo se encarrila luego de los primeros minutos de proyección.
La representación de un tema tan áspero como la trata necesita personalidades duras que logren el tono adecuado para establecer un símil convincente, pero no todos logran alcanzarlo.

Calificación: Buena