Una historia para ser contada

Lo que comenzó como una idea ambiciosa a mediados del año pasado, finalmente se materializó en "Sandro de América, la serie", la nueva apuesta de Telefé que vio la luz el pasado lunes.

Basada en el libro de Graciela Guiñazú y con libros de Esther Feldman, la ficción arrancó con un rating astronómico, marcando 15,4 puntos en su debut. Es que el producto final dirigido por Adrián Caetano no defrauda y oficia, si se quiere, como el homenaje que Sandro tanto se merecía.
Es que "Sandro de América, la serie" es un unitario pero también funciona como biopic, mostrando cómo fue que ese muchacho humilde de Valentín Alsina terminó siendo un ídolo de multitudes.

SANGRE JOVEN
Agustín Sullivan toma la posta del cantante en su adolescencia, aunque también se lo pudo ver en su etapa adulta encarnado por Antonio Grimau, quien sentado en su camarín comienza a recordar y por medio de un necesario flashback, la historia se retrotrae a principios de los "60.
Entonces la cámara de Caetano se mete en los clubes de barrio donde se presentaba el cantante con su banda, Los de fuego, y las primeras fanáticas comenzaban a asomarse, enardecidas con ese joven que arriba del escenario se movía como nadie. Ahí es donde Sullivan logra brillar y parecerse aún más al ídolo, más allá de que por momentos el playback sea bastante notorio.
Julián Kartún, Gastón Sofritti, Sergio Surraco, Vanesa Butera, Jorge Suárez, Luis Machín y Hugo Arana conforman un elenco secundario sólido que da el grado de verosimilitud que la historia necesita. En este sentido, Machín se luce como el manager de Sandro, aquel que se da cuenta que ""el pibe vale oro"" y debe seguirlo contra viento y marea, así eso significara separarlo de su querida banda.

MUCHAS MUJERES
En esa escalada al éxito queda en el camino Silvina, una de sus primeras novias, encarnada por Calu Rivero. Ella será sólo una de las tantas mujeres que pasarán por la vida del ídolo, lo que sirve como excusa para las participaciones especiales de actrices de alto perfil mediático como la "China" Suárez, Lali Espósito e Isabel Macedo, lo que seguramente ayudará a que el rating se mantenga alto.
Pero no todo será alegría y fanfarria: el crudo ojo de Caetano no le esquiva a nada y ya en estos primeros capítulos plasma la tempranda adicción del cantante al cigarrillo, vicio que le terminó costando la vida.
El unitario funciona como un verdadero bálsamo de la tevé local, en una grilla copada por tiras turcas. Con buena factura, actuaciones sobresalientes y excelente recreación de época, "Sandro de América, la serie" es una de las opciones más interesantes de la televisión actual.

Calificación: Muy buena.