EL CAMINO PASA POR REDUCIR LOS SUBSIDIOS ECONOMICOS

Clave, talar el gasto nacional

POR NADIN ARGAÑARAZ *

El presupuesto es uno de los procesos fundamentales que estructuran el funcionamiento del Estado. Se espera que el conjunto de componentes del presupuesto coordine las prioridades y objetivos de Política Económica del Ejecutivo. Es decir, el mismo refleja el direccionamiento de políticas que regirán el accionar gubernamental nacional a lo largo del año 2018.

Las proyecciones fiscales incluidas en el presupuesto llevan implícitas definiciones relevantes, no sólo para el 2018 sino también para lo que se espera que suceda con el cierre fiscal del 2017. Puede resaltarse que en forma agregada el proyecto estima para el corriente año un resultado primario deficitario en $409.461 millones, en contraste con la previsión realizada un año atrás, que vaticinaba un resultado negativo de $405.033,2 millones.

Por su parte, el resultado fiscal (luego del pago de intereses) se estima que termine el año 2017 con un déficit de $633.767 millones, mientras que se había previsto un resultado fiscal igual a $632.060. Cabe resaltar que no se encuentran importantes cambios en las proyecciones.
Las proyecciones elaboradas en el marco del presupuesto para el próximo año reflejan un crecimiento de los ingresos totales del 19% y de solamente el 16,2% para los gastos totales. Paralelamente, se observa una tendencia a la baja en el peso del Gasto Primario en términos del PIB (-1.1 p.p.).

Además, se espera un Resultado Primario deficitario equivalente a 3,2% del PBI y un Resultado Fiscal negativo correspondiente a $681.802,9 millones (5,5% PBI).

DESAFIO

El proyecto de presupuesto plantea que en 2017 se logrará superar la meta planteada respecto al resultado primario del sector público nacional, ya que el déficit primario será equivalente a 4% del PBI según las proyecciones oficiales.

Para 2018 la meta prefijada es lograr un déficit del 3,2% del PBI. Es decir que se plantea una mejora de 0,8% del PBI en el resultado primario. Para transitar este camino hay que tener en cuenta que en 2018 no se contará con el empuje adicional que brindó el blanqueo, y por lo tanto se trabaja con una previsión de caída de los ingresos tributarios de 0,4 puntos porcentuales que son compensadas parcialmente por un crecimiento de las rentas de la propiedad de 0,2 p.p.

Para alcanzar la meta aparece como necesaria una reducción del peso del gasto nacional en el producto de 1 p.p., la cual se lograría según el presupuesto principalmente a través de una reducción del peso de los subsidios a energía y transporte (-0,6 p.p.) junto a una caída de 0,5 p.p. de los gastos corrientes (salarios, funcionamiento y otros) y una pequeña reducción de la importancia de las transferencias corrientes a provincias (-0,1 p.p.).

De alcanzarse estas previsiones, el resultado primario mejorará los 0,8 puntos requeridos por la meta. Teniendo en cuenta el incremento del peso de los intereses de la deuda de 0,14 p.p. del producto, el resultado fiscal mejorará si se cumple el presupuesto en 0,6 p.p., pasando de un déficit de 6,15% del PBI en 2017 a uno del 5,55% del PBI el próximo año.

* Director del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf).