En la cancha y en la vida
Crítica: "Hoy partido a las 3". Inicio promisorio de una nueva directora, Clarisa Navas, que con altos y bajos logra una película auténtica, con buen nivel interpretativo y ajustado plano formal.
"Hoy partido a las 3" (Argentina-Paraguay, 2017. Dirección y Guión: Clarisa Navas. Fotografía: Armin Marchesini Weihmuller. Música: Fran Villalba. Dirección de Arte: Claudio Ojeda, Matias Carmagnola, Maia Navas y Natalia Lezcano Sticchi. Sonido: Mercedes Rondina y Tani Sotosca. Con: Ana Carolina García, Silvana Dorrego, Maria Esprigitto, Heidi Pomis, Yaneth Román, Gabito Gutierrez, Gustavo Bravo y Angie Sánchez. Malba (sábados de septiembre, a las 18; y en El Recoleta, Junín 1930, los domingos de septiembre, a las 19).
Primera película de una joven directora correntina, de menos de treinta años, "Hoy partido a las 3" ambienta el relato en una cancha de barrio de futbol 5, donde un grupo de chicas, apasionadas por el futbol, intenta apuntalar un espacio en que el deporte, la posibilidad de un trabajo tan diferente al que cualquiera de ellas realiza transforme la vida. Eso se ve en la pregunta esquemática de una de ella que parece amagar retirarse: ¿Qué vas a hacer con tu vida si no jugás más?.
Filme atípico donde priman las relaciones humanas de esas adolescentes que intentan construir espacios de relación, manejar códigos comunes y una pasión común.
La directora Clarisa Navas construye acertadamente un tiempo narrativo en que sitúa el tema de la espera, de los entretiempos del partido en los que parece construirse la base humana del relato. Hay una buena pintura de ambientes, un animador del evento político deportivo y un entrenador (únicos referentes masculinos significativos) que pintan un tiempo, un lugar en los que el futbol parece ser una excusa para el político de turno que hará irrupción en algún momento para decir nada, lo que todos escuchan como fondo, pero nadie atiende por la habitualidad del mensaje y el vacio que inunda el contenido
Un grupo de chicas no profesionales que se mueven bien, que dudan, tiran onda, mensajean en entretiempos, inician romances entre ellas en un espacio peleado donde poder jugar cuesta, aunque sea en un suburbio pobre y nadie dispute nada.
Inicio promisorio de una nueva directora que con altos y bajos logra una película auténtica, con buen nivel interpretativo y ajustado plano formal.
Calificación: Buena
Isabel Croce