La fantasía de una fan

Este es el mar

Por Mariana Enríquez
Random House. 125 páginas

Que sabe narrar, sus lectores, los críticos y el mundo literario lo tienen claro. Y que cada vez sorprende más, también. Se trata de Mariana Enríquez que con Este es el mar lanza una pequeña novela que la sigue reafirmando como una de las grandes escritoras argentinas de la actualidad. En este caso, la autora del poderoso Las cosas que perdimos en el fuego se zambulle en el mundo de las fans de las estrellas de rock. Aquí el terror ya no aparece como central, aunque está, y le cede un poco el paso al fantasy con toques de novela psicológica.

Enríquez realiza una interesante deformación de la realidad, tan propia de su escritura, y convierte a las fans en personajes inmortales, una suerte de hadas de la muerte que salen de su propia dimensión y que para sobrevivir deben transformar en leyenda a ciertos artistas. ¿Cómo lo logran?

Matándolos, ni más ni menos. Ya "cayeron" John Lennon, Kurt Cobain y Elvis Presley y ahora le toca a James Warren del grupo Fallen. El problema que se le presenta a Helena, la protagonista, es que termina enamorada del muy terrestre James, y le va a costar cumplir con el "mandato".

Narrada con ritmo, simplicidad y profundidad al mismo tiempo, Este es el mar sabe cómo "enganchar" al lector, lo seduce con hermosas imágenes, diálogos frescos y tensión. Enríquez construye una historia sobrenatural en la que aparecen cuestiones como la devoción, la elección del propio destino y una interesante indagación de los mecanismos que conforman a un artista. Y no sólo eso: a través de los ojos de Helena, nos enteramos del dolor de James y la historia toma así un interesante giro biográfico.

Todos estos variados elementos confluyen con maestría gracias a la escritura de una gran autora. Después de leerla, quedan muchas más ganas de seguirla en sus mundos, siempre tan fantásticos como inquietantemente reales.