Historieta con la mejor literatura

La comedia literaria

Por Catherine Meurisse
Impedimenta. 143 páginas

Una idea original y divertida es la que plasmó Catherine Meurisse en La comedia literaria, suerte de apretado manual de la literatura francesa en forma de historieta, desde el Cantar de Roldán hasta los autores existencialistas de mediados del siglo XX.

Aunque arbitrario y breve cumple una doble función: divierte e informa. A un primer capítulo dedicado a la Edad Media le siguen otros cinco referidos a los siglos transcurridos entre el XVI y el XX. De cada centuria Meurisse (ilustradora nacida en 1980) elige un puñado de autores representativos, a quienes retrata a partir de su personalidad y sus obras más influyentes.

Desfilan así en rápida sucesión Rabelais y su visión humanista; el grupo de La Pléyade; el padre del ensayo, Montaigne, a quien se pinta psicoanalizándose; Corneille y su falta de respeto por las unidades dramáticas; las fábulas de La Fontaine; la irreverencia tolerada de Molire; Racine; el Iluminismo de Diderot, Voltaire y Rousseau, hasta el advenimiento del romanticismo, al que se define con humor en todos sus lugares comunes. Luego el gran siglo de la novela encarnado en Balzac (traza su retrato uno de sus personales, Rastignac), el obsesivo Flaubert y Zola como espía de la vida real para componer sus libros naturalistas. El cierre, previo repaso de las creaciones de Proust, Colette y Céline, llega con los años del existencialismo sartreano.

Debe destacarse el gran poder de síntesis del guión y del dibujo para condensar, siempre con ironía, las obras y los escritores capitales de cada época. Impresionan especialmente las viñetas dedicadas a los dramaturgos del XVI o a la creación de la Comedia Humana balzaciana. Digno mérito de Meurisse, quien se formó en la revista satírica Charlie Hebdo, a cuyo ataque sobrevivió, y publicó otras cuatro novelas gráficas.