Hay más casos de cáncer de colon entre los "millennials"

Un estudio de la Sociedad Americana de Cáncer identificó que los jóvenes nacidos a partir de 1990 tienen dos veces más riesgo de sufrir cáncer de colon y cuatro veces más en el caso de cáncer de recto.

En la Argentina se detectan anualmente más de 13.000 casos de cáncer de colon o colorrectal, siendo el segundo de mayor mortalidad (luego del cáncer de pulmón). Por temor al diagnóstico, por vergüenza o prejuicio, o bien por falta de información, los médicos no son consultados a tiempo y es así que esta enfermedad se lleva por año 7.000 vidas que podrían salvarse.

Si bien es cierto que quien posee antecedentes familiares tiene mayor posibilidad de presentar pólipos o cáncer de colon, el no tenerlos no invalida la posibilidad de desarrollar la enfermedad. El 75% de los pacientes a los que se les diagnosticó la enfermedad no presentaban antecedentes de ningún tipo.

Para su diagnóstico precoz y prevención se recomienda la realización de una colonoscopia a partir de los 50 años, ya que a esta edad aumentan las probabilidades de desarrollar la enfermedad. Sin embargo en las últimas décadas comenzó a identificarse un aumento significativo en la cantidad de pacientes bastante más jóvenes. El alerta lo dio la Sociedad Americana del Cáncer luego de analizar la información sobre incidencia de esta enfermedad desde 1974 a 2013 en adultos de más de 20 años.

Este estudio sobre casi medio millón de casos del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos indicó que las tasas de prevalencia de la enfermedad en las personas nacidas entre 1950 y 1980 (integrantes de la denominada "Generación X") disminuyeron; pero a la par se incrementaron en las generaciones nacidas desde 1990 (también conocidos como "Millennials"). Estos jóvenes poseen el doble de riesgo de sufrir cáncer de colon y el cuádruple en el caso de cáncer de recto.

POSIBLE EXPLICACION

"No está completamente claro el motivo por el cual sucede este aumento en la incidencia de cáncer de colon en los pacientes jóvenes. En los últimos 15 años subió 22% la incidencia en menores de 50 años mientras que en los mayores de 50 años hay una leve disminución. Un factor a tener en cuenta es que los programas de screening se realizan a mayores de 50 años y empieza a verse el impacto del control.

Algunos factores que se reconocen para que aumente en los jóvenes se asocian a la pandemia de la obesidad, el sedentarismo y la alimentación inadecuada", asegura el doctor Christian Sánchez, jefe de Endoscopías del centro Gastroenterología Diagnóstica y Terapéutica (Gedyt).

El profesional destaca también que "influye mucho el estilo de vida y la genética para padecer cáncer de colon. Hay una clara relación entre la obesidad y el riesgo de padecer esta enfermedad. Las dietas ricas en carnes rojas y bajas en fibras también son factores de riesgo. En relación a la genética, se demostró que los familiares de 1º grado (padres o hermanos) y 2º grado (abuelos o tíos) tienen mayor riesgo de tener pólipos y cáncer que la población general". 

Por ello, en estos casos, se indica realizar la colonoscopia antes de los 50 años, explica. "De hecho, en el caso de contar con antecedentes familiares, indicamos visitar al gastroenterólogo 10 años antes que el caso índice. Es decir, la edad indicada de consultar al médico sería 10 años antes que la que tuvo el pariente (de 1º o 2º grado) cuando le fuera detectada la enfermedad, y la periodicidad de visita será cada 5 años", añade.

Los investigadores al frente del estudio destacaron la necesidad de una conciencia mayor entre médicos clínicos y público en general; además de un estudio etiológico para profundizar las causas de la tendencia. Si bien muchos casos suelen estar definidos por la herencia, se halló una importante asociación con el factor de estilo de vida y es precisamente este grupo en el que profundiza la tendencia.

Por eso durante el corriente mes Gedyt llevará adelante la campaña de concientización "Prevenir para Vivir; la detección temprana salva vidas", que tiene como objetivo dar a conocer este tipo de cáncer, concientizar sobre la necesidad de la detección temprana y la importancia de los controles periódicos.