Para el Gobierno el incidente con la custodia del testigo protegido fue un "robo al voleo"

Así lo afirmó el subsecretario de Política Criminal del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación.

 

El subsecretario de Política Criminal del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Martín Casares, consideró que todo indica que fue un "robo al voleo" el incidente con la custodia de Leonardo Fariña en el barrio de Parque Chacabuco, donde hubo un tiroteo en el que murió un delincuente y resultó herido un prefecto.

"Nos hace pensar que se trataría de un hecho de inseguridad. Lo que dicen los prefectos es que exigían las llaves" del coche y "en ningún momento se lo menciona" al testigo protegido por la llamada causa de "la ruta del dinero K", expresó el funcionario.

Al lugar llegó un auto rojo del que bajaron dos delincuentes que, según Casares, le dijeron a uno de los prefectos: "Dame las llaves del auto, dame las llaves del auto", frase acompañada de "algunas puteadas".

El agente se identificó y se inició un tiroteo, que terminó con uno de los prefectos herido en pierna y uno de los atacantes muerto. "Es herido uno de los prefectos, que recibe un impacto de bala en una pierna y lo llevan al (Hospital) Churruca, por suerte el impacto es de entrada y salida y en menos de 24 horas es dado de alta. Recibe también disparos uno de los atacantes, que muere a 50 metros del lugar", contó Casares.

En declaraciones al canal Todo Noticias (TN), el funcionario remarcó que "Fariña nunca estuvo en riesgo porque no estaba en la escena, se entera después cuando lo sacan otros tres custodios" del Grupo Albatros de la fuerza federal.

Además, aclaró que "la Policía Científica informa que se levantaron entre 20 y 30 casquillos que ahora se estarán identificando" en la escena del tiroteo.

Si bien sostuvo que se apunta a un "robo al voleo", indicó que no se descarta "ninguna hipótesis" sobre el hecho teniendo en cuenta quién es Fariña, que había llegado "aproximadamente media hora antes" al edificio a comer con un amigo.

"Por supuesto que es un hombre en riesgo", admitió sobre el llamado "valijero" del detenido empresario kirchnerista Lázaro Báez y añadió que "entre cinco y ocho personas permanentemente lo están siguiendo y controlando".

En octubre del año pasado, se registró otro incidente cuando un auto pasó junto a la casa de Fariña y baleó el vehículo de su custodia.

El ex financista fue clave en su relato ante la Justicia para posibilitar la detención de Báez, acusado de hechos de corrupción en la obra pública durante el gobierno kirchnerista.