Advirtió en su mensaje por la Navidad, sobre las divisiones en la sociedad

La Iglesia advirtió por "las grietas que se profundizan" y llamó al diálogo y la unidad

La Conferencia Episcopal le entregó a Macri un documento Olivos donde cuestionó a los políticos que anteponen "intereses electorales" y que le "hacen mucho daño al país".

La Iglesia advirtió en su mensaje por la Navidad, sobre las divisiones en la sociedad argentina y criticó a los dirigentes políticos.

La Conferencia Episcopal Argentina, que preside monseñor José María Arancedo, cuestionó a los políticos que anteponen "intereses electorales" y que le "hacen mucho daño al país". Y además, hizo un llamado "apremiante" a los empresarios para que inviertan en empleo digno y bien remunerado.

Los obispos advirtieron también por las divisiones que se "profundizan" en la sociedad, por lo que hicieron un llamado al diálogo, la unidad y la reconciliación de los argentinos, además de reclamar "mayor sensibilidad" con pobres y excluidos.

"Como pueblo necesitamos sentarnos a la mesa, disponernos para el diálogo responsable y permanente, y así fortalecer nuestra aún frágil convivencia ciudadana", aseveró en el mensaje que la mesa ejecutiva del Episcopado llevó el viernes al encuentro con Mauricio Macri.

El Presidente se reunió en la Quinta de Olivos con casi todos los obispos que integran la comisión ejecutiva de la CEA: monseñor José María Arancedo, arzobispo de Santa Fe, presidente; el cardenal Mario Poli, arzobispo de Buenos Aires y vicepresidente 1 de la CEA, y monseñor Carlos Malfa, obispo de Chascomús y secretario general de la CEA.

Por su parte, el arzobispo de Tucumán, Alfredo Zecca, destacó que la Navidad siempre llena de esperanza, pese a los momentos de dolor padecidos durante el año, e hizo un llamado a la reconciliación y a "apostar todos a una unidad cada día más profunda".

En tanto, una decena de obispos patagónicos coincidieron en afirmar que "el camino verdadero y lleno de esperanza para superar diferencias y conflictos no será nunca el de la violencia sino el del respeto, el diálogo y el encuentro fraterno".

El obispo de Quilmes, Carlos Tissera, expresó su preocupación por el crecimiento de la pobreza, el aumento de la cantidad de niños que "necesitan comer", el trabajo que está faltando y el "dinero que no alcanza", por lo que exhortó a unirse en el reclamo de las 3T que plantea el papa Francisco: techo, tierra y trabajo.