Admitió que “no hubo animosidad” bajo la gestión del kirchnerismo para tratar de modificar el resultado evaluativo

Bullrich adjudicó la exclusión de la Argentina del ranking de las pruebas PISA de 2015 a "fallas graves"

El ministro de Educación enfatizó que “este se parece más al país que no tenía compromiso con las estadísticas ni con la verdad, ese es el país que venimos a cambiar”.

El ministro de Educación, Esteban Bullrich, adjudicó hoy la exclusión de la Argentina del ranking de las pruebas PISA de 2015 a “fallas graves” cometidas durante el kirchnerismo, pero admitió que “no hubo animosidad” bajo esa gestión, para tratar de modificar el resultado evaluativo.

"Este es el país que no queremos: ser noticia porque no hicimos las cosas bien", alertó el funcionario, al confirmar que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) excluyó a la Argentina del ranking que mide estándares de educación en todo el mundo.

No obstante, la OCDE publicará los datos recogidos entre los alumnos de 15 años en Argentina de forma separada debido a que la muestra es más pequeña que la requerida para comparar con otras naciones, de acuerdo a lo indicado por el ministro. 

Al quejarse de la exclusión del ranking, Bullrich enfatizó que “este se parece más al país que no tenía compromiso con las estadísticas ni con la verdad, el país del Indec, que publicaba una inflación que no era real, y ese es el país que venimos a cambiar”.

“No queremos un país donde se pueda construir un relato, mucho menos sobre la educación, porque la mala educación es también hacer mal las cosas, mal los procedimientos”, criticó el funcionario en una conferencia de prensa brindada en Casa Rosada.

Sobre esta situación, puntualizó que “hubo fallas técnicas graves, que nos llevan a esta situación de exclusión”, en tanto que, desde el actual Gobierno, “queremos un país que valore la transparencia, en donde todos sepan lo que estamos haciendo, para corregir lo que hacemos mal, y multiplicar lo que hacemos bien”.

Bullrich anunció que “vamos a trabajar para que esto nunca más suceda; queremos que la Argentina sea noticia, pero no porque no hizo los deberes; vamos a trabajar para que en la próxima evaluación, el resultado sea excelente”.

Sin embargo, el ministro aclaró que “no hubo animosidad, no hubo una específica voluntad de afectar el resultado” sino “un error grave que nos saca del ranking” por “querer enviar una población de 13.280 escuelas, pero de esa población faltaron 3.096 escuelas”.

Adjudicó tal situación a “incompetencia”, al señalar que “hemos hecho toda la investigación, (pero) no hubo animosidad, (ya que) las escuelas no son de una región específica, sino que es generalizado”, para concluir que “está claro que la muestra no es comparable, como dijeron los organismos”.

“La lectura que hacemos es que hubo poco apego y compromiso con las estadísticas, que el error es grave”, pero advirtió que “el cuestionamiento no es hacia la educación pública, sino hacia el funcionamiento de un Gobierno”.