Decadencia política

Si es cierto que una imagen vale mil palabras, la foto de Boudou, D"Elía, Esteche y Mariotto con los pies en la fuente de la Plaza de Mayo describe con crudeza y fidelidad un punto sobresaliente en la decadencia del peronismo. También de la de un sistema político colonizado en su mayor parte por ese partido que gobernó durante 25 de los últimos 33 años de democracia.

Los cuatro personajes forman parte de una de las mayores estafas ideológicas de la historia nacional consumada bajo las banderas del PJ. Su presencia en una manifestación de sindicatos estatales también peronistas expone la disfuncionalidad de un sistema incapaz de generar una fuerza opositora a Mauricio Macri mínimamente creíble. Estos personajes, la viva imagen del kirchnerismo junto con la ex presidenta Cristina Fernández, generan opiniones negativas superiores al 65% en cualquier encuesta que se consulte.

Lo que cuenta además la foto es algo de lo que en algún momento deberá hacerse cargo la dirigencia. El voto por Mauricio Macri involucró un castigo no sólo para el kirchnerismo, sino para toda la clase política que le había sido funcional. Los peronistas en primer lugar, pero también los radicales y los partidos menores (hasta los sellos de goma) que se sumaron para beneficiarse.

Una "nomenklatura" que aparece en todas las administraciones y en la cual los dirigentes con etiqueta de "progresistas" ocupan un lugar central. A ellos repudió más del 50% de los votantes al elegir un partido inexistente como el PRO, que no tenía cuadros ni para formar tres gabinetes de mediano nivel.

Podría decirse que el resultado del balotaje fue una suerte de crisis de 2001 circunscripta a la política, sin los bancos cerrados ni la gente en la calle ni el "que se vayan todos" a los gritos, pero con una interpretación muy simple: Macri ganó, porque la mayoría de la sociedad estaba cansada de políticos que se enriquecen hasta límites obscenos o se aumentan generosamente sueldos y dietas mientras la pobreza trepa por arriba del 30%. Si el gabinete nacional se llenó de empresarios o ejecutivos es porque los políticos son responsables de esta decadencia sin fin e hicieron un desastre; no porque los votantes fueran engañados por la propaganda electoral o por una maquinación de la CIA.

Como consecuencia de esta situación el gobierno opera en una suerte de vacío político. El activismo "K" o filo "K" compromete al peronismo por su legado de corrupción y pobreza, pero no es el único problema de la dirigencia opositora. Otros candidatos, como Sergio Massa que propone una suerte de kirchnerismo adecentado, sufre por la exposición pública de los D"Elías y Mariottos, hecho que tampoco beneficia a la otra esperanza blanca del PJ: Florencio Randazzo.

Potenciales aliados menores, como la alfonsinista Margarita Stolbizer, también padecen esas irrupciones, porque no pueden cerrar acuerdos con ex funcionarios "k" que andan por la cornisa y en cualquier momento pueden ser liquidados con una denuncia. Esta decadencia política, resultado de la corrupción y la ineptitud, es la que hizo posible el triunfo de Macri y hace posible que gobierne aun en condiciones económicas muy adversas.