En agradecimiento a los subsidios recibidos en la posguerra

Alumnos de una escuela de Japón celebraron el "Día de la Argentina"

El lazo entre ambos establecimientos no es antojadizo: desde 1987, cada 16 de octubre, asiste a Nagata alguna autoridad diplomática de la Embajada de Argentina en Japón con el propósito de participar de la celebración.

Alumnos de sexto grado de una escuela municipal del interior de Japón, que desde hace más de 27 años festeja el "Día de la Argentina" en agradecimiento a los subsidios recibidos en la posguerra, viajaron por primera vez al país y fueron agasajados por estudiantes del colegio "Japón", en el barrio porteño de Villa General Mitre. 

Seis niños de entre diez y doce años de la escuela Nagata volaron 30 horas desde la prefectura (provincia) de Ibaraki, en la pequeña ciudad de Sakai donde viven alrededor de 900.000 personas, para celebrar en un colegio público de la Ciudad de Buenos Aires el Día de la Argentina.

El lazo entre ambos establecimientos no es antojadizo: desde 1987, cada 16 de octubre, asiste a Nagata alguna autoridad diplomática de la Embajada de Argentina en Japón con el propósito de participar de la celebración.

En 1853 desembarcaba en Uraga -bahía de Tokio- la expedición del Comodoro Perry, en cuya comitiva se encontraba un argentino de apellido Montenegro que hizo buenas migas con Sakujirou Nomoto, el encargado de los controles migratorios. 

Muchos años después, en 1933, con motivo del desembarco del nieto de Perry se publicaba la nota "Buscamos a los nietos de todos quienes tuvieron relaciones con Perry". El nieto del aduanero respondió la publicación.

Anoticiado de aquel encuentro, el ministro Arturo Montenegro -nieto del primer Montenegro- decidió visitar la ciudad de Sakai y da inicio a los intercambios entre la Embajada Argentina en Japón y esa ciudad. 
Durante su estadía -siete años- la Escuela Nagata recibió una subvención para dar becas a los alumnos que se llamaron Montenegro. 

Más acá en el tiempo, en el patio de una escuela pública porteña, seis alumnos japoneses se presentaron ayer en castellano ante sus pares argentinos: por primera vez consiguieron becas para poder conocer el país.

El encuentro, que incluyó una simpática versión -por fonética- de "Zamba de mi esperanza", un video explicativo de sus labores en la escuela Nagat, una demostración de Soran Bushi, un baile tradicional de Japón y cantaron el himno de su escuela.

Los alumnos de la escuela Japón -de los 130 estudiantes ninguno es descendiente de japoneses- presentaron un video explicativo sobre el ritual del mate que terminó con una degustación -amarga- de la infusión vernácula. Además, entregaron a los invitados de Nagata un paquete con alfajores de dulce de leche.