Crítica: "No Yo" y "La última cinta de Krapp", de Samuel Beckett

Recordando al autor irlandés

Roly Serrano y Marina Tamar, protagonistas de dos complejos monólogos. Al final, el público, agradecido, aplaude y festeja la posibilidad de sumergirse en el universo de Beckett. Tan hermético y profundamente humano, como siempre.

"No Yo" de Samuel Beckett. Traducción y adaptación Hugo Halbrich y Rubén Pires. Dirección: Rubén Pires. Actúa: Marina Tamar. "La última cinta de Krapp" de Samuel Beckett. Dirección: Omar Aita. Actúa: Roly Serrano. Vestuario y diseño de espacio: Carlos Di Pascuo. Iluminación: Myriam Selhi. El Tinglado (Mario Bravo 948), domingos a las 16.

"Me acabo de dar un "beckettazo" ", dice Roly Serrano, desde el escenario, visiblemente emocionado, al terminar la función luego de los aplausos. Y de eso se trata: aquellos que vayan al teatro El Tinglado, los domingos a las 16 -horario no tan inusual como en el pasado pero aún raro- podrán darse una panzada del gran autor irlandés. La obra, "Beckett contra Beckett" -una creación de los directores Omar Aita y Rubén Pires-, junta dos monólogos independientes que se desarrollan uno tras otro en apenas 60 minutos.

El primero de los textos es No Yo (1972), perteneciente al último período de Beckett en el que radicalizó su búsqueda de experimentación. Acá vemos solamente la boca de una mujer que habla. El resto del escenario y la platea es completamente negro. Sin poder detenerse, quieta, la protagonista nos brinda una catarata de palabras, víctima tal vez de una compulsión irrefrenable. 

Marina Tamar, protagonista, apela a todo su oficio vocal -es fundamentalmente una cantante- para articular ese dificilísimo texto. 

Con muchos vericuetos, sombras y claroscuros, "No yo" por momentos -probablemente buscándolo- se vuelve casi imposible de seguir. Tamar logra en ciertos pasajes transmitir esa emoción alocada que constituye este potente monólogo. Faltaría quizá algo más de matices para poder acertar con la trasmisión de un texto claramente desafiante.

PARTITURA COMPLICADA

El segundo componente de "Becket vs Beckett" es "La última cinta de Krapp" (1958). Se trata de una también complicada "partitura", aunque quizá menos enigmática, que cuenta en esta versión con la gran ventaja de tener a un actor como Roly Serrano interpretándola.

Serrano logra dar plena vida al envejecido señor Krapp. Atado a su magnetófono, el protagonista escucha viejas cintas grabadas con su voz, todas catalogadas y numeradas. Las oye y se enoja, grita, ríe. En definitiva, lucha consigo mismo y contra sus fantasmas.

En este caso, la escenografía de Carlos Di Pascuo logra enmarcar el ir y venir de Krapp con ese pasado que lo atormenta y del que no puede zafar aunque lo intente. También el vestuario ayuda al protagonista a recrear a este hombre sumergido en el dolor. Al final, el público, agradecido, aplaude y festeja la posibilidad de sumergirse en el universo de Beckett. Tan hermético y profundamente humano, como siempre.

Calificación: Buena