La Iglesia se despega de López: Casaretto señaló que el obispo Di Monte "se cortaba solo"

"No puedo empezar a hablar sin decir que estoy dolido por la situación que vive el país y que salpica a la Iglesia con un hecho de corrupción", sostuvo el obispo emérito de San Isidro.

El obispo emérito de San Isidro y miembro de la Pastoral Social, monseñor Jorge Casaretto, dijo hoy que el caso del ex funcionario K José López, detenido cuando quería esconder casi 9 millones de dólares en un monasterio, "salpica a la Iglesia con un hecho de corrupción"; aseguró que ello causa "mucha vergüenza y dolor" y afirmó que el fallecido arzobispo Rubén Di Monte "se cortaba solo".

"No puedo empezar a hablar sin decir que estoy dolido por la situación que vive el país y que salpica a la Iglesia con un hecho de corrupción", sostuvo al Casaretto hablar en el marco del encuentro anual de la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresas (ACDE).

Casaretto tomó distancia del fallecido arzobispo de Mercedes Luján, monseñor Rubén Di Monte, a quien se le atribuyen vínculos con funcionarios kirchneristas acusados de corrupción y que tenía jurisdicción sobre el monasterio de General Rodríguez donde López quiso esconder la plata. 

"En la Iglesia no sabíamos nada y, aunque me cueste hablar de una persona muerta, debo decir que (Di Monte) se cortaba solo", aseveró.

"La Iglesia en los últimos 20 años estuvo en una profunda introspección interna, luego de que en la década del '70 sus hermanos se mataran entre sí; pero el obispo Di Monte se cortaba sólo, no participaba y nos da mucha vergüenza y dolor", insistió en afirmar.

En tanto, el fiscal federal Federico Delgado pidió el procesamiento con prisión preventiva para López, secretario de Obras Públicas del gobierno kirchnerista, en el marco de la causa en la que es investigado por presunto "enriquecimiento ilícito".

Además, reclamó que el caso, actualmente en manos del juez federal Daniel Rafecas, pase a Julián Ercolini, quien tiene a su cargo una megainvestigación por el presunto pago de sobreprecios en las obras públicas ejecutadas por la anterior administración.

Delgado sostuvo que López "no explicó la diferencia que existe entre los datos que se desprenden de sus declaraciones juradas patrimoniales presentadas mientras se desempeñó como secretario de Obras Públicas, con respecto a la suma de U$S 8.982.047, de euros 153.610 y $ 159.114" halladas en su poder en el episodio del monasterio Nuestra Señora del Rosario de Fátima, situado en la localidad bonaerense de General Rodríguez.

"Las circunstancias de modo, tiempo y lugar en las que fue detenido López revelan con nitidez que estaba intentando asegurar la impunidad de hecho escondiendo las pruebas del delito", añadió el fiscal.

"El señor López administró la obra pública. Desde allí incrementó su patrimonio. Su comportamiento se inscribe en esa matriz de sentido", justificó el fiscal.

Y el flamante juez de la Corte Suprema Horacio Rosatti confirmó que renunció como ministro de Justicia durante el gobierno de Néstor Kirchner en 2005 porque "no" le "cerraban los precios" de la obra pública que manejaba José López.

"Por supuesto que comparto el combate contra la corrupción y en lo que hace a la justicia la no impunidad es fundamental", subrayó Rosatti.

Sobre si su renuncia a Justicia en 2005 tuvo que ver con los sobreprecios en la obra pública, afirmó que "muchas veces uno tiene que plantarse y decir 'no' frente a algo que le parece que no es lo que corresponde, en ese caso yo dije no porque no me cerraban los precios".

"No se concretó esa licitación, se cayó justamente porque faltaba una firma, hay que valorizar el 'no' de los funcionarios", amplió.

En ese sentido, Rosatti aseguró que "los funcionarios son los que se registran en esa época, la secretaria de Obra Pública estaba a su nombre (en alusión a López)", aunque aclaró que no quiere "hacer nombres propios porque probablemente alguno de estos casos puedan llegar a la Corte y de ninguna manera voy a prejuzgar".