Culpó fundamentalmente a factores externos como el desplome de los precios del petróleo

Putin afirma que Rusia saldrá de la crisis en dos años en el peor de los casos

El presidente ruso denunció que Occidente "ha decidido que es un imperio y que todos los demás son vasallos" a los que hay que aplastar, y opinó que quieren convertir al "oso ruso" en un "trofeo de caza".

Moscú - El presidente ruso, Vladímir Putin, aseguró hoy que en dos años, en el peor de los casos, la economía rusa saldrá de la actual crisis económica, que achacó fundamentalmente a factores externos como el desplome de los precios del petróleo.

"Nuestra economía saldrá de su situación actual. ¿Cuánto tiempo nos llevará? En las circunstancias más desfavorables, creo, dos años", dijo Putin durante su conferencia de prensa anual ante varios centenares de periodistas rusos y extranjeros.

Denunció que Occidente "ha decidido que es un imperio y que todos los demás son vasallos" a los que hay que aplastar, y opinó que quieren convertir al "oso ruso" en un "trofeo de caza".

El jefe del Kremlin aseguró que la salida de la crisis y ulterior crecimiento de la economía rusa son "inevitables" y podrían producirse incluso antes de dos años.

Argumentó que aunque se han ralentizado los ritmos de crecimiento de la economía mundial, éste continúa y "con toda seguridad se mantendrá".

"La coyuntura económica cambiará y con el crecimiento de la economía mundial se requerirán recursos energéticos adicionales", dijo Putin, quien al mismo tiempo no descartó la posibilidad de que el precio del crudo continúe bajando.

Putin atribuyó el desplome del rublo y de la bolsa rusa a factores externos, en particular la caída del precio del petróleo, pero reconoció también que Rusia no ha dado los pasos necesarios para "diversificar su economía", altamente dependiente de las exportaciones de hidrocarburos.

Señaló que las reciente medidas adoptadas por el Gobierno y el Banco Central de Rusia para estabilizar la situación en el mercado han sido adecuadas, pero opinó que algunas acciones podía haber sido adoptadas con más celeridad.

"Todo se hace correctamente, pero se podría ir un medio paso más adelante", dijo Putin, que defendió a la gobernadora del Banco Central, Elvira Nabiúlina, al señalar que la entidad emisora "no es la única responsable de la situación económica del país.

MURO VIRTUAL

En su conferencia de prensa anual, Putin acusó a los socios occidentales de querer levantar un nuevo Muro de Berlín, esta vez "virtual", con sus medidas contra Rusia.

"¿Acaso no es un muro el escudo antimisiles al lado de nuestras fronteras? ¿Acaso no es un muro (...) la ampliación de la OTAN al Este, algo que nos prometieron que no pasaría tras la caída del muro de Berlín?", se preguntó el líder del Kremlin.

Putin volvió a referirse a las sanciones de Occidente contra Moscú, adoptadas por el papel de Rusia en la crisis de Ucrania, como un nuevo intento de Estados Unidos y Europa de "arrancar las garras y los dientes al oso" ruso para que se convierta "en un trofeo de caza".

"A veces pienso si no sería mejor que el oso se quedara tranquilo, comiendo bayas y miel. A lo mejor así lo dejarían en paz. ¡No le dejarán! Porque siempre intentarán ponerle la cadena. Y cuando lo encadenen, le arrancarán los dientes y las garras, que a día de hoy son (nuestra) fuerza de contención nuclear", dijo el mandatario ruso.

Al mismo tiempo, reconoció que las sanciones occidentales ya han hecho daño a la economía rusa, y son causantes de "en torno al 25-30 por ciento de los problemas económicos" que sufre el país.

Por otro lado y tras admitir la presencia de voluntarios rusos en el Este de Ucrania, combatiendo en el bando rebelde, Putin reiteró que "en la conciencia social" de Rusia, el conflicto armado en las regiones rebeldes ucranianas "es una operación de castigo llevada a cabo por las actuales autoridades de Kiev".

"No fueron los milicianos del este los que enviaron sus unidades a Kiev, sino las autoridades de Kiev las que llevaron a sus fuerzas armadas al este", subrayó el jefe del Kremlin, que volvió a calificar de "golpe de Estado" el vuelco de poder que vivió Ucrania a comienzos de este año.